Las organizaciones obreras, campesina y sindicales exigieron un cambio en el modelo de desarrollo, económico, político y social.
01 de febrero de 2011 por Alberto Espinosa Sección Nacional
Este lunes 31 de enero diversas organizaciones obreras, campesinas y sindicales realizaron una megamarcha por avenida Reforma, hasta el Zócalo capitalino, para demandar un cambio en el modelo de desarrollo económico, político y social.
La manifestación encabezada por el Movimiento Nacional por la Soberanía Alimentaria y Energética; los Derechos de los Trabajadores y las Libertades Democráticas, concluyó con saldo blanco.
Por su parte, el secretario del Trabajo, Javier Lozano aseguró que el gobierno federal es respetuoso de las demandas legítimas de la población, al mismo tiempo que aseguró no descartarse como candidato a la presidencia en 2012. Aunque precisó que es necesario esperar los tiempos y reglas así como el contexto político para tomar la decisión.
Los marchistas llegaron hasta Palacio Nacional donde realizaron un mitin en el que llamaron a construir un gran acuerdo para concretar sus demandas. Agustín Rodríguez, dirigente del STUNAM y miembro de la presidencia colegiada de la UNT, fue el encargado de leer las demandas de los manifestantes.
Explicó que es necesario se realicen las reformas necesarias hacia un modelo más incluyente deseable y posible. Señaló que el respeto a los derechos humanos debe ser el eje orientador de las reformas política, económica, social, del campo y de política exterior, y que esto debe estar apegado a la democracia y la inclusión social.
Rodríguez invitó a que cada quien, desde su particular visión del cambio y de acuerdo a sus propias estrategias, trabaje en generar el consenso para asumir como principal objetivo la reformulación del modelo de desarrollo para el crecimiento, la inclusión y la equidad.
Explicó igualmente que la reformulación debe hacerse por medio de canales democráticos, lo que requiere de ajustes al régimen político de modo que existan sujetos e instituciones que lleven a cabo la reformulación, esto conduce a una reforma política junto con otras que son necesarias, añadió.
Entre otras demandas concretas estuvo la de que el ejército y la marina regresen a sus cuarteles; que no se permita la impunidad de los feminicidios; ni las violaciones a los derechos humanos de la población.
Condenaron así mismo, la reforma laboral del gobierno federal y la alianza por la calidad de la educación, ya que estos proyectos no han sido consensuados con los trabajadores. Demandaron igualmente, el respeto a la libertad y la autonomía sindical.
En el mitin también habló Martín Esparza Flores, líder del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), quien señaló “Hoy tenemos la representatividad legal del SME y las herramientas para ir por lo que sigue: nuestra fuente de trabajo, por nuestro Contrato Colectivo y los derechos de los jubilados”.
Esparza solicitó el apoyo de las organizaciones ahí reunidas para que el movimiento de los electricistas logre sus objetivos.
La marcha concluyó sin incidentes violentos, ni personas lesionadas, según informó la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSPDF); estuvo vigilada por 700 elementos de la policía capitalina, y las avenidas Paseo de la Reforma y Juárez fueron cerradas durante la marcha y posteriormente reabiertas.