lunes, 19 de septiembre de 2011

Otro fregadazo de Martincito

El Financiero
CONFIDENCIAL

 Luis Soto
Lunes, 19 de Septiembre de 2011



¡Lo que nadie puede discutir es que ese Martincito salió más ca...nijo que bonito, junto con su planilla-pandilla!, reconocen aquellos estudiosos del sindicalismo corrupto y rapaz que engendró el PRI, y que los gobiernos panistas se han encargado de "amamantar".

Martín Esparza y su pandilla le volvieron a asestar otro fregadazo similar al que hace un año le pusieron al secretario de Gobernación, al del Trabajo y a todos los funcionarios del gobierno que tienen vela en el asunto del Sindicato Mexicano de Electricistas.

Paradójicamente, hoy no fue necesario que algunos de los integrantes de la mencionada pandilla se declararan en huelga de hambre, como lo hicieron en 2010, cuando "Cayetano" estuvo a punto de "morirse de la risa" (que no de hambre), por lo que el secretario de Gobernación, José Francisco Blake Mora, tuvo que intervenir para prácticamente darle respiración de boca a boca -prometiéndole la "Toma de nota"- y así resucitarlo, políticamente, claro. Bueno, no sólo a él sino a su movimiento.

Este año bastó que le dieran a Martincito "una lana", dicen los malosos, y prometerles nuevamente, como lo hicieron en julio de 2010, "Analizar y resolver en su caso, sobre las vías que procedan para la inserción laboral y productiva de los trabajadores miembros del Sindicato Mexicano de Electricistas que no se han liquidado respecto a la extinción de Luz y Fuerza del Centro, en el sector eléctrico. Para tal efecto se revisarán las propuestas que dicho sindicato ha presentado al Gobierno Federal, sin perjuicio de las observaciones o contrapropuestas que el Gobierno Federal haga. Dicho análisis, y en su caso los acuerdos que de él deriven, deberán concluir a más tardar el último día de noviembre del 2011". Bueno, eso dice el numeral uno de la reunión de trabajo que sostuvieron funcionarios del gobierno federal, del gobierno local, y algunos mequetrefes para que Martincito y sus "muchachos" se retiraran de la plancha del Zócalo y así dar paso a la celebración de las fiestas patrias. Ah, también les prometieron "analizar y agilizar los procesos judiciales para la resolución de los casos penales de los trabajadores miembros del SME, conforme a la Ley". O sea, a aquellos cuasi malvivientes del sindicato que han cometido tropelías y pillerías y han atentado contra bienes de la nación, entre otras cosas, en las marchas y protestas, los van indultar, exonerar, a dejarlos libres, pues.

¡De verdad que estos funcionarios del gobierno federal no aprenden!, exclaman los susodichos estudiosos del susodicho sindicalismo. El año pasado el secretario de Gobernación -quien, por cierto, recién había llegado de su pueblo a hacerse cargo de tan importante dependencia- lo primero que le prometió a Martincito fue la "Toma de nota", la cual el entonces talentoso, brillante, virtuoso, secretario de Trabajo, Javier Lozano, le había negado insistentemente a la "planilla-pandilla".

Ese compromiso generó un enfrentamiento -primero público y después medio privado en alguna reunión del gabinete- entre Lozano y Blake. ¡Tengan su pinche "Toma de nota"!, prácticamente les espetó Javier; ese asunto no está a negociación, insistió el titular de Trabajo, quien hizo sus rabietas por lo que había prometido Blake Mora.

Entre julio y diciembre del año pasado hubo una serie de "jaloneos" en donde participaron varios funcionarios del gabinetazo que intervinieron en el asunto del SME; en uno de ellos, frente al Presidente de la República, el mismísimo secretario del Trabajo amenazó con renunciar porque el gobierno federal iba a hacer el anuncio de que cumpliría su palabra -empeñada en julio- de darle la multicitada "Toma de nota" al dirigente del SME.

Dicen que en una de esas reuniones, el presidente Felipe Calderón preguntó a su secretario de Gobernación: ¿Tú prometiste eso, José Francisco? Y Blake le respondió, palabras más, palabras menos: ¡Pues es que se nos iba a morir Cayetano, señor, y sería injusto que le cargaran ese muertito! Pues hay que cumplir, ordenó el primer mandatario. Lozano intervino, según la versión oficial que contaron al columnista, para decir, también palabras más, palabras menos, lo siguiente: ¡Pues si le van a dar la "Toma de nota" a Martincito, yo renuncio! ¿Cómo que te vas mi "gallo"?, mascullaron algunos de sus compañeros. Bueno, me voy pero no me voy, dicen que dijo Javier. Y expuso: Si me dejan operar el asunto, para que no hagamos el ridículo, me quedo. En caso contrario, renuncio.

En diciembre de 2010 el mismo Lozano tuvo que salir a dar la cara en ese penoso asunto, y declarar urbi et orbi, que la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje había decidido darle la "Toma de Nota" a Martín Esparza. Y así fue como Javier Lozano Alarcón salió airoso de ese momento crítico, ayudado, claro, por algunos de sus amigos a quienes hoy, mal agradecido como es, les reclama: ¡Atásquense atacándome!

Por cierto, en los acuerdos que se firmaron la semana pasada entre el gobierno federal, el SME y "coadyuvantes", el secretario Lozano no apareció como firmante. ¿Berrinche o alguna señal? En todos los documentos del año pasado estampó su "poderosa".

Agenda previa

Mientras Martincito y su planilla-pandilla daban el clásico "grito" la noche del 15 de septiembre, otros de plano dijeron no. Un lector expuso sus razones: No di el grito porque después del sabio y patriótico discurso de la joven sargento (Evelyn), me di cuenta, con profundo dolor, que formo parte de la generación de la crisis; de los desanimados y sin posteridad; de los miopes, desencantados, desalentados y pesimistas; de los que generan en sus mentes una conmoción antinacionalista; de quienes están empeñados en transformar el denuedo en fracaso; de los que padecen endémicas aflicciones; de aquellos que sufren penas y expresan quejas; en suma, de los que están hundidos en la parálisis anímica.

En esas tristes condiciones, ¿usted cree que yo y los millones de mexicanos que no piensan, como la señorita Evelyn, íbamos a tener ganas de comprar matracas, cornetas, serpentinas, espanta-suegras, silbatos y banderitas para festejar la Independencia nacional?