sábado, 30 de junio de 2012

El Siete Leguas

GENERALES DE VILLA.

Las soldaderas - Revolución Mexicana

La Cabeza de Pancho Villa



Una visión sociológica de la mente de uno de los forajidos y héroes de todos los tiempos.

Por Eduardo Barraza
E-mail: editor@barriozona.com



Anita Brenner / Idols Behind Altars
Eduardo Barraza periodista y escritor mexicano, editor de la revista Barriozona, y director del Insituto Hispano de Asuntos.

Artículo Relacionado: El Sistema Político Mexicano

En los ideales revolucionarios del proyecto democrático que se esbozaba para el México de principios del Siglo XX, Pancho Villa encontró una amplia arteria para expresar su intensa inconformidad social. La teoría de la revolución, enunciada por Francisco I. Madero, se convirtió en la causa para su rebeldía, y en la plataforma para su expresión violenta, la cual ahora percibía como justificada y como una actitud legítima de protesta en contra de las injusticias sociales que le habían empujado al bandolerismo. Villa era un hombre académicamente inculto, pero poseía una increíble intuición de lucha social, la cual, en su estado más brutal, lo convirtió en un criminal de carrera, y en un elemento antisocial de un sistema desigual y opresor. Villa, el bandolero, comprendió que la naciente revolución era el lenguaje con el que podía expresarse, y así se incorporó con toda la fuerza de su carácter indomable a pelear, transformándose en un agenterevolucionario acreditado por su propia condición de marginado.

Villa destacó por su astucia, su sagacidad y por su agresividad sorpresiva, pero este implacable guerrillero mexicano sobresalió más, substancialmente, porque él mismo era un producto nato de la discriminación, del abuso y de la pobreza de su contexto social. Villa evolucionó de ser víctima a vengador de su propia identidad de segregado, razón que explica por qué la clase pobre y explotada se identificaba con él; el caudillo era el pueblo mismo a caballo, voz y expresión colectiva de los desposeídos, quienes anhelaban una emancipación social. A través de Villa, ya como elemento de la catártica revolución, el clamor por justicia encontraba un portavoz para promover el cambio social. Villa fue una temible descarga emotiva para el grito reprimido del desheredado social, del ciudadano doblegado por la vara desmedida del abuso.

Como fenómeno social, Pancho Villa fue la hoz que recogió la cosecha de las semillas deinjusticiasembradas por la elite de ricos. Como manifestación sociológica y antropológica, Villa fue un monstruosocial,concebido en el vientre de una sociedad ultrajada. De esa monstruosidad, de ese ente espantoso que era Villa, esa misma minoría selecta se escandalizaba, como el progenitor que se perturba con el producto de su propio incesto, y que tiene que vivir con la pesadilla que él mismo engendró. En su irracionalidad bandolera, Pancho Villa fue el vómito de una nación hartada en su gula de despotismo, atropello, y dictadura; en su raciocinio revolucionario, en contraste, este ser, mitad hombre y mitad caballo, mitad realidad y mitad leyenda, fue un grito de parto para el nacimiento de un México con facciones de justicia social.

La dualidad de la naturaleza rebelde y revolucionaria del llamado Centauro del Norte, lo mismo le habilitó que le deshabilitó. Cuando cabalgó por la avenida de la causa sociopolítica, bajo la inspiración democrática de Madero, la agenda de Villa fue la reforma social, y su actitud, la de un líder igualitario. Pero cuando los avatares de la revolución lo despojaron de esa expresión justiciera, Villa volvió a transitar por sus conocidos atajos de bandolerismo, y a reagruparse en las montañas que atestiguaron su endurecimiento como bandido sanguinario. Villa volvía a comunicarse en el dialecto de la venganza y el odio violento. A causa de esa ambigüedad que caracterizó su vida y su muerte, no es posible encasillarle solamente como bandolero o revolucionario, o como héroe o villano, porque su carácter traspasó no sólo las estructuras sociales, pero también las dimensiones de su propio pensamiento guerrillero y militar, el cual le mitificó y le convirtió en un personaje de leyenda. Villa fue lo uno y lo otro a través de su vida.

Villa fue un hombre recio y de gran arrojo, pero también mostró ser vulnerable a sentimientos de marginalidad, derrota y traición. Tanto en su juventud como en su edad adulta, Villa reaccionó con un instinto que lo transformaba en una fiera social de ira destructora, cuya raíz era su condición de segregado. En los años posteriores a la muerte de Madero y a la dimisión de Victoriano Huerta, y luego de que Venustiano Carranza fuera reconocido oficialmente por el gobierno de Estados Unidos como presidente, Villa quedó al margen del gobierno mexicano y sin el apoyo armamentista que inicialmente había recibido de Estados Unidos. En su intento de derrocar a Carranza, Villa sufrió humillantes derrotas por el genio militar que fue Álvaro Obregón. Su otrora poderosa División del Norte acabó diezmada y dispersada, y su prestigio como general, desvanecido. Su expresión ya no volvería a ser de justicia social, sino de resentimiento y venganza, actitudes que evocan a Doroteo Arango, el muchacho que se dice vengó el ultraje cometido a su hermana.

A pesar de su eminencia guerrera, la visión revolucionaria de Villa nunca llegó a ser desarrollada plenamente. Su naturaleza indómita y combativa al servicio de la causa lo encumbró como un soldado nato e ideal para la batalla, pero su interés por la reforma social fue esporádico, y su movimiento careció de una clara ideología política. Villa no tuvo la capacidad de establecer un aparato legal para implementar un programa de progreso social a gran escala, debido a que la suya era una conciencia de lucha armada, no de discernimiento político. Su protesta violenta fue un símbolo de redención, pero fue por igual un estigma de penitencia.

En la idiosincrasia del mexicano, sin embargo, Villa constituye no sólo el héroe institucionalizado de la revolución, sino un ídolo popular que personifica las causas marginadas, un mito cohesivo que proporciona la oportunidad de desagravio simbólico para el alma del mexicano, especialmente en relación con el rencor por las incursiones norteamericanas en suelo mexicano, y en la percepción imperialista que se tiene de Estados Unidos hasta estos días. En el folklore nacional de México, Villa es un adalid que se vengó impunemente de Estados Unidos, hecho que perpetúo su popularidad y su fama, y dio, asimismo, lugar a una ideología revanchista con la que el mexicano cree restituirse y reivindicarse de la injuria recibida. La astucia, sagacidad, y capacidad de Villa para eludir al poderoso enemigo, actúan así como una válvula sociocultural que canaliza el fluido de rencor y resentimiento de un pueblo despojado y subyugado.

El epílogo de la vida de Villa –el campesino convertido en bandolero, el bandolero transformado en revolucionario, y el revolucionario vuelto en héroe– fue tan violenta y sanguinaria como su misma vocación guerrillera. Su muerte cerró el ciclo de venganza que se abrió cuando Doroteo Arango – epítome del campesino oprimido – comprendió su desfavorable condición social. Pancho Villa había nacido de esa inconformidad, de ese sentimiento de rechazo, y de la imposibilidad de obtener justicia por medios legales; fue el engendro de un gobierno déspota y dictatorial, un ser anómalo concebido en el sufrimiento y el dolor de una sociedad oprimida. En la postrimería de su convulsionada existencia, el monstruo sería aniquilado por la misma elite que le había parido. En su sepulcro, desprovisto de toda paz, el cadáver de Villa sería decapitado por alguien que quiso asegurarse, quizás, de que el monstruo no volviera a rebelarse.

Bibliografía
- Anita Brenner. Idols Behind Altars, The Story of the Mexican Spirit. 1970 (1929)
- Herbert Molloy Mason, Jr. The Great Pursuit, Pershing’s Expedition to Destroy Pancho Villa. 1995.
- Jim Tuck. Pancho Villa and John Reed, Two Faces of Romantic Revolution. First Edition, 1984.
- Judith Adler Hellman. Mexico in Crisis. Second Edition 1988.
- Steven O’Brien. Pancho Villa. Primera Edición, 1995.
“...el epitafio de Villa fue un suspiro universal de lamento y alivio.”

viernes, 29 de junio de 2012

MÉXICO, CREO EN TI: Manuel Bernal.

MÉXICO CREO EN TÍ !!!!!!!!!!!!!!!!!!

CONSTITUCION POLITICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS

ARTICULO 41. EL PUEBLO EJERCE SU SOBERANIA POR MEDIO DE LOS PODERES DE LA UNION, EN LOS CASOS DE LA COMPETENCIA DE ESTOS, Y POR LOS DE LOS ESTADOS, EN LO QUE TOCA A SUS REGIMENES INTERIORES, EN LOS TERMINOS RESPECTIVAMENTE ESTABLECIDOS POR LA PRESENTE CONSTITUCION FEDERAL Y LAS PARTICULARES DE LOS ESTADOS, LAS QUE EN NINGUN CASO PODRAN CONTRAVENIR LAS ESTIPULACIONES DEL PACTO FEDERAL.

REFORMADO EN SU INTEGRIDAD POR DECRETO PUBLICADO EN EL DIARIO OFICIAL DE LA FEDERACION EL 13 DE NOVIEMBRE DE 2007).

LA RENOVACION DE LOS PODERES LEGISLATIVO Y EJECUTIVO SE REALIZARA MEDIANTE ELECCIONES LIBRES, AUTENTICAS Y PERIODICAS, CONFORME A LAS SIGUIENTES BASES:

I. LOS PARTIDOS POLITICOS SON ENTIDADES DE INTERES PUBLICO; LA LEY DETERMINARA LAS NORMAS Y REQUISITOS PARA SU REGISTRO LEGAL Y LAS FORMAS ESPECIFICAS DE SU INTERVENCION EN EL PROCESO ELECTORAL. LOS PARTIDOS POLITICOS NACIONALES TENDRAN DERECHO A PARTICIPAR EN LAS ELECCIONES ESTATALES, MUNICIPALES Y DEL DISTRITO FEDERAL.

LOS PARTIDOS POLITICOS TIENEN COMO FIN PROMOVER LA PARTICIPACION DEL PUEBLO EN LA VIDA DEMOCRATICA, CONTRIBUIR A LA INTEGRACION DE LA REPRESENTACION NACIONAL Y COMO ORGANIZACIONES DE CIUDADANOS, HACER POSIBLE EL ACCESO DE ESTOS AL EJERCICIO DEL PODER PUBLICO, DE ACUERDO CON LOS PROGRAMAS, PRINCIPIOS E IDEAS QUE POSTULAN Y MEDIANTE EL SUFRAGIO UNIVERSAL, LIBRE, SECRETO Y DIRECTO. SOLO LOS CIUDADANOS PODRAN FORMAR PARTIDOS POLITICOS Y AFILIARSE LIBRE E INDIVIDUALMENTE A ELLOS; POR TANTO, QUEDAN PROHIBIDAS LA INTERVENCION DE ORGANIZACIONES GREMIALES O CON OBJETO SOCIAL DIFERENTE EN LA CREACION DE PARTIDOS Y CUALQUIER FORMA DE AFILIACION CORPORATIVA.

LAS AUTORIDADES ELECTORALES SOLAMENTE PODRAN INTERVENIR EN LOS ASUNTOS INTERNOS DE LOS PARTIDOS POLITICOS EN LOS TERMINOS QUE SEÑALEN ESTA CONSTITUCION Y LA LEY.

II. LA LEY GARANTIZARA QUE LOS PARTIDOS POLITICOS NACIONALES CUENTEN DE MANERA EQUITATIVA CON ELEMENTOS PARA LLEVAR A CABO SUS ACTIVIDADES Y SEÑALARA LAS REGLAS A QUE SE SUJETARA EL FINANCIAMIENTO DE LOS PROPIOS PARTIDOS Y SUS CAMPAÑAS ELECTORALES, DEBIENDO GARANTIZAR QUE LOS RECURSOS PUBLICOS PREVALEZCAN SOBRE LOS DE ORIGEN PRIVADO.

EL FINANCIAMIENTO PUBLICO PARA LOS PARTIDOS POLITICOS QUE MANTENGAN SU REGISTRO DESPUES DE CADA ELECCION, SE COMPONDRA DE LAS MINISTRACIONES DESTINADAS AL SOSTENIMIENTO DE SUS ACTIVIDADES ORDINARIAS PERMANENTES, LAS TENDIENTES A LA OBTENCION DEL VOTO DURANTE LOS PROCESOS ELECTORALES Y LAS DE CARACTER ESPECIFICO. SE OTORGARA CONFORME A LO SIGUIENTE Y A LO QUE DISPONGA LA LEY:

A) EL FINANCIAMIENTO PUBLICO PARA EL SOSTENIMIENTO DE SUS ACTIVIDADES ORDINARIAS PERMANENTES SE FIJARA ANUALMENTE, MULTIPLICANDO EL NUMERO TOTAL DE CIUDADANOS INSCRITOS EN EL PADRON ELECTORAL POR EL SESENTA Y CINCO POR CIENTO DEL SALARIO MINIMO DIARIO VIGENTE PARA EL DISTRITO FEDERAL. EL TREINTA POR CIENTO DE LA CANTIDAD QUE RESULTE DE ACUERDO A LO SEÑALADO ANTERIORMENTE, SE DISTRIBUIRA ENTRE LOS PARTIDOS POLITICOS EN FORMA IGUALITARIA Y EL SETENTA POR CIENTO RESTANTE DE ACUERDO CON EL PORCENTAJE DE VOTOS QUE HUBIEREN OBTENIDO EN LA ELECCION DE DIPUTADOS INMEDIATA ANTERIOR.

B) EL FINANCIAMIENTO PUBLICO PARA LAS ACTIVIDADES TENDIENTES A LA OBTENCION DEL VOTO DURANTE EL AÑO EN QUE SE ELIJAN PRESIDENTE DE LA REPUBLICA, SENADORES Y DIPUTADOS FEDERALES, EQUIVALDRA AL CINCUENTA POR CIENTO DEL FINANCIAMIENTO PUBLICO QUE LE CORRESPONDA A CADA PARTIDO POLITICO POR ACTIVIDADES ORDINARIAS EN ESE MISMO AÑO; CUANDO SOLO SE ELIJAN DIPUTADOS FEDERALES, EQUIVALDRA AL TREINTA POR CIENTO DE DICHO FINANCIAMIENTO POR ACTIVIDADES ORDINARIAS.

C) EL FINANCIAMIENTO PUBLICO POR ACTIVIDADES ESPECIFICAS, RELATIVAS A LA EDUCACION, CAPACITACION, INVESTIGACION SOCIOECONOMICA Y POLITICA, ASI COMO A LAS TAREAS EDITORIALES, EQUIVALDRA AL TRES POR CIENTO DEL MONTO TOTAL DEL FINANCIAMIENTO PUBLICO QUE CORRESPONDA EN CADA AÑO POR ACTIVIDADES ORDINARIAS. EL TREINTA POR CIENTO DE LA CANTIDAD QUE RESULTE DE ACUERDO A LO SEÑALADO ANTERIORMENTE, SE DISTRIBUIRA ENTRE LOS PARTIDOS POLITICOS EN FORMA IGUALITARIA Y EL SETENTA POR CIENTO RESTANTE DE ACUERDO CON EL PORCENTAJE DE VOTOS QUE HUBIEREN OBTENIDO EN LA ELECCION DE DIPUTADOS INMEDIATA ANTERIOR.

LA LEY FIJARA LOS LIMITES A LAS EROGACIONES EN LOS PROCESOS INTERNOS DE SELECCION DE CANDIDATOS Y LAS CAMPAÑAS ELECTORALES DE LOS PARTIDOS POLITICOS. LA PROPIA LEY ESTABLECERA EL MONTO MAXIMO QUE TENDRAN LAS APORTACIONES DE SUS SIMPATIZANTES, CUYA SUMA TOTAL NO PODRA EXCEDER ANUALMENTE, PARA CADA PARTIDO, AL DIEZ POR CIENTO DEL TOPE DE GASTOS ESTABLECIDO PARA LA ULTIMA CAMPAÑA PRESIDENCIAL; ASIMISMO ORDENARA LOS PROCEDIMIENTOS PARA EL CONTROL Y VIGILANCIA DEL ORIGEN Y USO DE TODOS LOS RECURSOS CON QUE CUENTEN Y DISPONDRA LAS SANCIONES QUE DEBAN IMPONERSE POR EL INCUMPLIMIENTO DE ESTAS DISPOSICIONES.

DE IGUAL MANERA, LA LEY ESTABLECERA EL PROCEDIMIENTO PARA LA LIQUIDACION DE LAS OBLIGACIONES DE LOS PARTIDOS QUE PIERDAN SU REGISTRO Y LOS SUPUESTOS EN LOS QUE SUS BIENES Y REMANENTES SERAN ADJUDICADOS A LA FEDERACION.

III. LOS PARTIDOS POLITICOS NACIONALES TENDRAN DERECHO AL USO DE MANERA PERMANENTE DE LOS MEDIOS DE COMUNICACION SOCIAL.

APARTADO A. EL INSTITUTO FEDERAL ELECTORAL SERA AUTORIDAD UNICA PARA LA ADMINISTRACION DEL TIEMPO QUE CORRESPONDA AL ESTADO EN RADIO Y TELEVISION DESTINADO A SUS PROPIOS FINES Y AL EJERCICIO DEL DERECHO DE LOS PARTIDOS POLITICOS NACIONALES, DE ACUERDO CON LO SIGUIENTE Y A LO QUE ESTABLEZCAN LAS LEYES:

A) A PARTIR DEL INICIO DE LAS PRECAMPAÑAS Y HASTA EL DIA DE LA JORNADA ELECTORAL QUEDARAN A DISPOSICION DEL INSTITUTO FEDERAL ELECTORAL CUARENTA Y OCHO MINUTOS DIARIOS, QUE SERAN DISTRIBUIDOS EN DOS Y HASTA TRES MINUTOS POR CADA HORA DE TRANSMISION EN CADA ESTACION DE RADIO Y CANAL DE TELEVISION, EN EL HORARIO REFERIDO EN EL INCISO D) DE ESTE APARTADO;

B) DURANTE SUS PRECAMPAÑAS, LOS PARTIDOS POLITICOS DISPONDRAN EN CONJUNTO DE UN MINUTO POR CADA HORA DE TRANSMISION EN CADA ESTACION DE RADIO Y CANAL DE TELEVISION; EL TIEMPO RESTANTE SE UTILIZARA CONFORME A LO QUE DETERMINE LA LEY;

C) DURANTE LAS CAMPAÑAS ELECTORALES DEBERA DESTINARSE PARA CUBRIR EL DERECHO DE LOS PARTIDOS POLITICOS AL MENOS EL OCHENTA Y CINCO POR CIENTO DEL TIEMPO TOTAL DISPONIBLE A QUE SE REFIERE EL INCISO A) DE ESTE APARTADO;

D) LAS TRANSMISIONES EN CADA ESTACION DE RADIO Y CANAL DE TELEVISION SE DISTRIBUIRAN DENTRO DEL HORARIO DE PROGRAMACION COMPRENDIDO ENTRE LAS SEIS Y LAS VEINTICUATRO HORAS;

E) EL TIEMPO ESTABLECIDO COMO DERECHO DE LOS PARTIDOS POLITICOS SE DISTRIBUIRA ENTRE LOS MISMOS CONFORME A LO SIGUIENTE: EL TREINTA POR CIENTO EN FORMA IGUALITARIA Y EL SETENTA POR CIENTO RESTANTE DE ACUERDO A LOS RESULTADOS DE LA ELECCION PARA DIPUTADOS FEDERALES INMEDIATA ANTERIOR;

F) A CADA PARTIDO POLITICO NACIONAL SIN REPRESENTACION EN EL CONGRESO DE LA UNION SE LE ASIGNARA PARA RADIO Y TELEVISION SOLAMENTE LA PARTE CORRESPONDIENTE AL PORCENTAJE IGUALITARIO ESTABLECIDO EN EL INCISO ANTERIOR, Y

G) CON INDEPENDENCIA DE LO DISPUESTO EN LOS APARTADOS A Y B DE ESTA BASE Y FUERA DE LOS PERIODOS DE PRECAMPAÑAS Y CAMPAÑAS ELECTORALES FEDERALES, AL INSTITUTO FEDERAL ELECTORAL LE SERA ASIGNADO HASTA EL DOCE POR CIENTO DEL TIEMPO TOTAL DE QUE EL ESTADO DISPONGA EN RADIO Y TELEVISION, CONFORME A LAS LEYES Y BAJO CUALQUIER MODALIDAD; DEL TOTAL ASIGNADO, EL INSTITUTO DISTRIBUIRA ENTRE LOS PARTIDOS POLITICOS NACIONALES EN FORMA IGUALITARIA UN CINCUENTA POR CIENTO; EL TIEMPO RESTANTE LO UTILIZARA PARA FINES PROPIOS O DE OTRAS AUTORIDADES ELECTORALES, TANTO FEDERALES COMO DE LAS ENTIDADES FEDERATIVAS. CADA PARTIDO POLITICO NACIONAL UTILIZARA EL TIEMPO QUE POR ESTE CONCEPTO LE CORRESPONDA EN UN PROGRAMA MENSUAL DE CINCO MINUTOS Y EL RESTANTE EN MENSAJES CON DURACION DE VEINTE SEGUNDOS CADA UNO. EN TODO CASO, LAS TRANSMISIONES A QUE SE REFIERE ESTE INCISO SE HARAN EN EL HORARIO QUE DETERMINE EL INSTITUTO CONFORME A LO SEÑALADO EN EL INCISO D) DEL PRESENTE APARTADO. EN SITUACIONES ESPECIALES EL INSTITUTO PODRA DISPONER DE LOS TIEMPOS CORRESPONDIENTES A MENSAJES PARTIDISTAS A FAVOR DE UN PARTIDO POLITICO, CUANDO ASI SE JUSTIFIQUE.

LOS PARTIDOS POLITICOS EN NINGUN MOMENTO PODRAN CONTRATAR O ADQUIRIR, POR SI O POR TERCERAS PERSONAS, TIEMPOS EN CUALQUIER MODALIDAD DE RADIO Y TELEVISION.

NINGUNA OTRA PERSONA FISICA O MORAL, SEA A TITULO PROPIO O POR CUENTA DE TERCEROS, PODRA CONTRATAR PROPAGANDA EN RADIO Y TELEVISION DIRIGIDA A INFLUIR EN LAS PREFERENCIAS ELECTORALES DE LOS CIUDADANOS, NI A FAVOR O EN CONTRA DE PARTIDOS POLITICOS O DE CANDIDATOS A CARGOS DE ELECCION POPULAR. QUEDA PROHIBIDA LA TRANSMISION EN TERRITORIO NACIONAL DE ESTE TIPO DE MENSAJES CONTRATADOS EN EL EXTRANJERO.

LAS DISPOSICIONES CONTENIDAS EN LOS DOS PARRAFOS ANTERIORES DEBERAN SER CUMPLIDAS EN EL AMBITO DE LOS ESTADOS Y EL DISTRITO FEDERAL CONFORME A LA LEGISLACION APLICABLE.

APARTADO B. PARA FINES ELECTORALES EN LAS ENTIDADES FEDERATIVAS, EL INSTITUTO FEDERAL ELECTORAL ADMINISTRARA LOS TIEMPOS QUE CORRESPONDAN AL ESTADO EN RADIO Y TELEVISION EN LAS ESTACIONES Y CANALES DE COBERTURA EN LA ENTIDAD DE QUE SE TRATE, CONFORME A LO SIGUIENTE Y A LO QUE DETERMINE LA LEY:

A) PARA LOS CASOS DE LOS PROCESOS ELECTORALES LOCALES CON JORNADAS COMICIALES COINCIDENTES CON LA FEDERAL, EL TIEMPO ASIGNADO EN CADA ENTIDAD FEDERATIVA ESTARA COMPRENDIDO DENTRO DEL TOTAL DISPONIBLE CONFORME A LOS INCISOS A), B) Y C) DEL APARTADO A DE ESTA BASE;

B) PARA LOS DEMAS PROCESOS ELECTORALES, LA ASIGNACION SE HARA EN LOS TERMINOS DE LA LEY, CONFORME A LOS CRITERIOS DE ESTA BASE CONSTITUCIONAL, Y

C) LA DISTRIBUCION DE LOS TIEMPOS ENTRE LOS PARTIDOS POLITICOS, INCLUYENDO A LOS DE REGISTRO LOCAL, SE REALIZARA DE ACUERDO A LOS CRITERIOS SEÑALADOS EN EL APARTADO A DE ESTA BASE Y LO QUE DETERMINE LA LEGISLACION APLICABLE.

CUANDO A JUICIO DEL INSTITUTO FEDERAL ELECTORAL EL TIEMPO TOTAL EN RADIO Y TELEVISION A QUE SE REFIEREN ESTE APARTADO Y EL ANTERIOR FUESE INSUFICIENTE PARA SUS PROPIOS FINES O LOS DE OTRAS AUTORIDADES ELECTORALES, DETERMINARA LO CONDUCENTE PARA CUBRIR EL TIEMPO FALTANTE, CONFORME A LAS FACULTADES QUE LA LEY LE CONFIERA.

APARTADO C. EN LA PROPAGANDA POLITICA O ELECTORAL QUE DIFUNDAN LOS PARTIDOS DEBERAN ABSTENERSE DE EXPRESIONES QUE DENIGREN A LAS INSTITUCIONES Y A LOS PROPIOS PARTIDOS, O QUE CALUMNIEN A LAS PERSONAS.

DURANTE EL TIEMPO QUE COMPRENDAN LAS CAMPAÑAS ELECTORALES FEDERALES Y LOCALES Y HASTA LA CONCLUSION DE LA RESPECTIVA JORNADA COMICIAL, DEBERA SUSPENDERSE LA DIFUSION EN LOS MEDIOS DE COMUNICACION SOCIAL DE TODA PROPAGANDA GUBERNAMENTAL, TANTO DE LOS PODERES FEDERALES Y ESTATALES, COMO DE LOS MUNICIPIOS, ORGANOS DE GOBIERNO DEL DISTRITO FEDERAL, SUS DELEGACIONES Y CUALQUIER OTRO ENTE PUBLICO. LAS UNICAS EXCEPCIONES A LO ANTERIOR SERAN LAS CAMPAÑAS DE INFORMACION DE LAS AUTORIDADES ELECTORALES, LAS RELATIVAS A SERVICIOS EDUCATIVOS Y DE SALUD, O LAS NECESARIAS PARA LA PROTECCION CIVIL EN CASOS DE EMERGENCIA.

APARTADO D. LAS INFRACCIONES A LO DISPUESTO EN ESTA BASE SERAN SANCIONADAS POR EL INSTITUTO FEDERAL ELECTORAL MEDIANTE PROCEDIMIENTOS EXPEDITOS, QUE PODRAN INCLUIR LA ORDEN DE CANCELACION INMEDIATA DE LAS TRANSMISIONES EN RADIO Y TELEVISION, DE CONCESIONARIOS Y PERMISIONARIOS, QUE RESULTEN VIOLATORIAS DE LA LEY.

IV. LA LEY ESTABLECERA LOS PLAZOS PARA LA REALIZACION DE LOS PROCESOS PARTIDISTAS DE SELECCION Y POSTULACION DE CANDIDATOS A CARGOS DE ELECCION POPULAR, ASI COMO LAS REGLAS PARA LAS PRECAMPAÑAS Y LAS CAMPAÑAS ELECTORALES.

LA DURACION DE LAS CAMPAÑAS EN EL AÑO DE ELECCIONES PARA PRESIDENTE DE LA REPUBLICA, SENADORES Y DIPUTADOS FEDERALES SERA DE NOVENTA DIAS; EN EL AÑO EN QUE SOLO SE ELIJAN DIPUTADOS FEDERALES, LAS CAMPAÑAS DURARAN SESENTA DIAS. EN NINGUN CASO LAS PRECAMPAÑAS EXCEDERAN LAS DOS TERCERAS PARTES DEL TIEMPO PREVISTO PARA LAS CAMPAÑAS ELECTORALES.

LA VIOLACION A ESTAS DISPOSICIONES POR LOS PARTIDOS O CUALQUIER OTRA PERSONA FISICA O MORAL SERA SANCIONADA CONFORME A LA LEY.

V. LA ORGANIZACION DE LAS ELECCIONES FEDERALES ES UNA FUNCION ESTATAL QUE SE REALIZA A TRAVES DE UN ORGANISMO PUBLICO AUTONOMO DENOMINADO INSTITUTO FEDERAL ELECTORAL, DOTADO DE PERSONALIDAD JURIDICA Y PATRIMONIO PROPIOS, EN CUYA INTEGRACION PARTICIPAN EL PODER LEGISLATIVO DE LA UNION, LOS PARTIDOS POLITICOS NACIONALES Y LOS CIUDADANOS, EN LOS TERMINOS QUE ORDENE LA LEY. EN EL EJERCICIO DE ESTA FUNCION ESTATAL, LA CERTEZA, LEGALIDAD, INDEPENDENCIA, IMPARCIALIDAD Y OBJETIVIDAD SERAN PRINCIPIOS RECTORES.

EL INSTITUTO FEDERAL ELECTORAL SERA AUTORIDAD EN LA MATERIA, INDEPENDIENTE EN SUS DECISIONES Y FUNCIONAMIENTO Y PROFESIONAL EN SU DESEMPEÑO; CONTARA EN SU ESTRUCTURA CON ORGANOS DE DIRECCION, EJECUTIVOS, TECNICOS Y DE VIGILANCIA. EL CONSEJO GENERAL SERA SU ORGANO SUPERIOR DE DIRECCION Y SE INTEGRARA POR UN CONSEJERO PRESIDENTE Y OCHO CONSEJEROS ELECTORALES, Y CONCURRIRAN, CON VOZ PERO SIN VOTO, LOS CONSEJEROS DEL PODER LEGISLATIVO, LOS REPRESENTANTES DE LOS PARTIDOS POLITICOS Y UN SECRETARIO EJECUTIVO; LA LEY DETERMINARA LAS REGLAS PARA LA ORGANIZACION Y FUNCIONAMIENTO DE LOS ORGANOS, ASI COMO LAS RELACIONES DE MANDO ENTRE ESTOS. LOS ORGANOS EJECUTIVOS Y TECNICOS DISPONDRAN DEL PERSONAL CALIFICADO NECESARIO PARA PRESTAR EL SERVICIO PROFESIONAL ELECTORAL. UNA CONTRALORIA GENERAL TENDRA A SU CARGO, CON AUTONOMIA TECNICA Y DE GESTION, LA FISCALIZACION DE TODOS LOS INGRESOS Y EGRESOS DEL INSTITUTO. LAS DISPOSICIONES DE LA LEY ELECTORAL Y DEL ESTATUTO QUE CON BASE EN ELLA APRUEBE EL CONSEJO GENERAL, REGIRAN LAS RELACIONES DE TRABAJO CON LOS SERVIDORES DEL ORGANISMO PUBLICO. LOS ORGANOS DE VIGILANCIA DEL PADRON ELECTORAL SE INTEGRARAN MAYORITARIAMENTE POR REPRESENTANTES DE LOS PARTIDOS POLITICOS NACIONALES. LAS MESAS DIRECTIVAS DE CASILLA ESTARAN INTEGRADAS POR CIUDADANOS.

EL CONSEJERO PRESIDENTE DURARA EN SU CARGO SEIS AÑOS Y PODRA SER REELECTO UNA SOLA VEZ. LOS CONSEJEROS ELECTORALES DURARAN EN SU CARGO NUEVE AÑOS, SERAN RENOVADOS EN FORMA ESCALONADA Y NO PODRAN SER REELECTOS. SEGUN SEA EL CASO, UNO Y OTROS SERAN ELEGIDOS SUCESIVAMENTE POR EL VOTO DE LAS DOS TERCERAS PARTES DE LOS MIEMBROS PRESENTES DE LA CAMARA DE DIPUTADOS, A PROPUESTA DE LOS GRUPOS PARLAMENTARIOS, PREVIA REALIZACION DE UNA AMPLIA CONSULTA A LA SOCIEDAD. DE DARSE LA FALTA ABSOLUTA DEL CONSEJERO PRESIDENTE O DE CUALQUIERA DE LOS CONSEJEROS ELECTORALES, EL SUSTITUTO SERA ELEGIDO PARA CONCLUIR EL PERIODO DE LA VACANTE. LA LEY ESTABLECERA LAS REGLAS Y EL PROCEDIMIENTO CORRESPONDIENTES.

EL CONSEJERO PRESIDENTE Y LOS CONSEJEROS ELECTORALES NO PODRAN TENER OTRO EMPLEO, CARGO O COMISION, CON EXCEPCION DE AQUELLOS EN QUE ACTUEN EN REPRESENTACION DEL CONSEJO GENERAL Y DE LOS QUE DESEMPEÑEN EN ASOCIACIONES DOCENTES, CIENTIFICAS, CULTURALES, DE INVESTIGACION O DE BENEFICENCIA, NO REMUNERADOS. LA RETRIBUCION QUE PERCIBAN SERA IGUAL A LA PREVISTA PARA LOS MINISTROS DE LA SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACION.

EL TITULAR DE LA CONTRALORIA GENERAL DEL INSTITUTO SERA DESIGNADO POR LA CAMARA DE DIPUTADOS CON EL VOTO DE LAS DOS TERCERAS PARTES DE SUS MIEMBROS PRESENTES A PROPUESTA DE INSTITUCIONES PUBLICAS DE EDUCACION SUPERIOR, EN LA FORMA Y TERMINOS QUE DETERMINE LA LEY. DURARA SEIS AÑOS EN EL CARGO Y PODRA SER REELECTO POR UNA SOLA VEZ. ESTARA ADSCRITO ADMINISTRATIVAMENTE A LA PRESIDENCIA DEL CONSEJO GENERAL Y MANTENDRA LA COORDINACION TECNICA NECESARIA CON LA ENTIDAD DE FISCALIZACION SUPERIOR DE LA FEDERACION.

EL SECRETARIO EJECUTIVO SERA NOMBRADO CON EL VOTO DE LAS DOS TERCERAS PARTES DEL CONSEJO GENERAL A PROPUESTA DE SU PRESIDENTE.

LA LEY ESTABLECERA LOS REQUISITOS QUE DEBERAN REUNIR PARA SU DESIGNACION EL CONSEJERO PRESIDENTE DEL CONSEJO GENERAL, LOS CONSEJEROS ELECTORALES, EL CONTRALOR GENERAL Y EL SECRETARIO EJECUTIVO DEL INSTITUTO FEDERAL ELECTORAL; QUIENES HAYAN FUNGIDO COMO CONSEJERO PRESIDENTE, CONSEJEROS ELECTORALES Y SECRETARIO EJECUTIVO NO PODRAN OCUPAR, DENTRO DE LOS DOS AÑOS SIGUIENTES A LA FECHA DE SU RETIRO, CARGOS EN LOS PODERES PUBLICOS EN CUYA ELECCION HAYAN PARTICIPADO.

LOS CONSEJEROS DEL PODER LEGISLATIVO SERAN PROPUESTOS POR LOS GRUPOS PARLAMENTARIOS CON AFILIACION DE PARTIDO EN ALGUNA DE LAS CAMARAS. SOLO HABRA UN CONSEJERO POR CADA GRUPO PARLAMENTARIO NO OBSTANTE SU RECONOCIMIENTO EN AMBAS CAMARAS DEL CONGRESO DE LA UNION.

EL INSTITUTO FEDERAL ELECTORAL TENDRA A SU CARGO EN FORMA INTEGRAL Y DIRECTA, ADEMAS DE LAS QUE LE DETERMINE LA LEY, LAS ACTIVIDADES RELATIVAS A LA CAPACITACION Y EDUCACION CIVICA, GEOGRAFIA ELECTORAL, LOS DERECHOS Y PRERROGATIVAS DE LAS AGRUPACIONES Y DE LOS PARTIDOS POLITICOS, AL PADRON Y LISTA DE ELECTORES, IMPRESION DE MATERIALES ELECTORALES, PREPARACION DE LA JORNADA ELECTORAL, LOS COMPUTOS EN LOS TERMINOS QUE SEÑALE LA LEY, DECLARACION DE VALIDEZ Y OTORGAMIENTO DE CONSTANCIAS EN LAS ELECCIONES DE DIPUTADOS Y SENADORES, COMPUTO DE LA ELECCION DE PRESIDENTE DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS EN CADA UNO DE LOS DISTRITOS ELECTORALES UNINOMINALES, ASI COMO LA REGULACION DE LA OBSERVACION ELECTORAL Y DE LAS ENCUESTAS O SONDEOS DE OPINION CON FINES ELECTORALES. LAS SESIONES DE TODOS LOS ORGANOS COLEGIADOS DE DIRECCION SERAN PUBLICAS EN LOS TERMINOS QUE SEÑALE LA LEY.

LA FISCALIZACION DE LAS FINANZAS DE LOS PARTIDOS POLITICOS NACIONALES ESTARA A CARGO DE UN ORGANO TECNICO DEL CONSEJO GENERAL DEL INSTITUTO FEDERAL ELECTORAL, DOTADO DE AUTONOMIA DE GESTION, CUYO TITULAR SERA DESIGNADO POR EL VOTO DE LAS DOS TERCERAS PARTES DEL PROPIO CONSEJO A PROPUESTA DEL CONSEJERO PRESIDENTE. LA LEY DESARROLLARA LA INTEGRACION Y FUNCIONAMIENTO DE DICHO ORGANO, ASI COMO LOS PROCEDIMIENTOS PARA LA APLICACION DE SANCIONES POR EL CONSEJO GENERAL. EN EL CUMPLIMIENTO DE SUS ATRIBUCIONES EL ORGANO TECNICO NO ESTARA LIMITADO POR LOS SECRETOS BANCARIO, FIDUCIARIO Y FISCAL.

EL ORGANO TECNICO SERA EL CONDUCTO PARA QUE LAS AUTORIDADES COMPETENTES EN MATERIA DE FISCALIZACION PARTIDISTA EN EL AMBITO DE LAS ENTIDADES FEDERATIVAS PUEDAN SUPERAR LA LIMITACION A QUE SE REFIERE EL PARRAFO ANTERIOR.

EL INSTITUTO FEDERAL ELECTORAL ASUMIRA MEDIANTE CONVENIO CON LAS AUTORIDADES COMPETENTES DE LAS ENTIDADES FEDERATIVAS QUE ASI LO SOLICITEN, LA ORGANIZACION DE PROCESOS ELECTORALES LOCALES, EN LOS TERMINOS QUE DISPONGA LA LEGISLACION APLICABLE.

VI. PARA GARANTIZAR LOS PRINCIPIOS DE CONSTITUCIONALIDAD Y LEGALIDAD DE LOS ACTOS Y RESOLUCIONES ELECTORALES, SE ESTABLECERA UN SISTEMA DE MEDIOS DE IMPUGNACION EN LOS TERMINOS QUE SEÑALEN ESTA CONSTITUCION Y LA LEY. DICHO SISTEMA DARA DEFINITIVIDAD A LAS DISTINTAS ETAPAS DE LOS PROCESOS ELECTORALES Y GARANTIZARA LA PROTECCION DE LOS DERECHOS POLITICOS DE LOS CIUDADANOS DE VOTAR, SER VOTADOS Y DE ASOCIACION, EN LOS TERMINOS DEL ARTICULO 99 DE ESTA CONSTITUCION.

EN MATERIA ELECTORAL LA INTERPOSICION DE LOS MEDIOS DE IMPUGNACION, CONSTITUCIONALES O LEGALES, NO PRODUCIRA EFECTOS SUSPENSIVOS SOBRE LA RESOLUCION O EL ACTO IMPUGNADO.
Folio: 8332

CONSTITUCION POLITICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS

ARTICULO 40. ES VOLUNTAD DEL PUEBLO MEXICANO CONSTITUIRSE EN UNA REPUBLICA REPRESENTATIVA, DEMOCRATICA, FEDERAL, COMPUESTA DE ESTADOS LIBRES Y SOBERANOS EN TODO LO CONCERNIENTE A SU REGIMEN INTERIOR; PERO UNIDOS EN UNA FEDERACION ESTABLECIDA SEGUN LOS PRINCIPIOS DE ESTA LEY FUNDAMENTAL.

CONSTITUCION POLITICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS

ARTICULO 39. LA SOBERANIA NACIONAL RESIDE ESENCIAL Y ORIGINARIAMENTE EN EL PUEBLO. TODO PODER PUBLICO DIMANA DEL PUEBLO Y SE INSTITUYE PARA BENEFICIO DE ESTE. EL PUEBLO TIENE EN TODO TIEMPO EL INALIENABLE DERECHO DE ALTERAR O MODIFICAR LA FORMA DE SU GOBIERNO.

CONSTITUCION POLITICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS

ARTICULO 35. SON PRERROGATIVAS DEL CIUDADANO:

I. VOTAR EN LAS ELECCIONES POPULARES;

II. PODER SER VOTADO PARA TODOS LOS CARGOS DE ELECCION POPULAR Y NOMBRADO PARA CUALQUIER OTRO EMPLEO O COMISION, TENIENDO LAS CALIDADES QUE ESTABLEZCA LA LEY;

(MODIFICADO POR LA REIMPRESION DE LA CONSTITUCION, PUBLICADA EN EL DIARIO OFICIAL DE LA FEDERACION EL 6 DE OCTUBRE DE 1986)

III. ASOCIARSE INDIVIDUAL Y LIBREMENTE PARA TOMAR PARTE EN FORMA PACIFICA EN LOS ASUNTOS POLITICOS DEL PAIS;

(REFORMADO MEDIANTE DECRETO PUBLICADO EN EL DIARIO OFICIAL DE LA FEDERACION EL 22 DE AGOSTO DE 1996)

IV. TOMAR LAS ARMAS EN EL EJERCITO O GUARDIA NACIONAL PARA LA DEFENSA DE LA REPUBLICA Y DE SUS INSTITUCIONES, EN LOS TERMINOS QUE PRESCRIBEN LAS LEYES, Y

(MODIFICADO POR LA REIMPRESION DE LA CONSTITUCION, PUBLICADA EN EL DIARIO OFICIAL DE LA FEDERACION EL 6 DE OCTUBRE DE 1986)



V. EJERCER EN TODA CLASE DE NEGOCIOS EL DERECHO DE PETICION.

martes, 26 de junio de 2012

Informe de Martín Esparza Flores sobre los acontecimientos en la SEGOB 2...

SME DENUNCIA


Reprimen a miembros del SME en la Secretaría de Gobernación 26 de junio ...

Reprime PF manifestación del SME; ocho heridos


Alrededor de 30 ex trabajadores protestaban afuera de SG en demanda del cumplimiento de los acuerdos logrados en septiembre pasado.

La Jornada.
Ariane Díaz
Publicado: 26/06/2012 09:06

México, DF. Integrantes del Sindicato Mexicano de Electricistas que se manifestaban frente a la Secretaria de Gobernación (SG) fueron "agredidos" por elementos de la Policía Federal, denunció el vocero del gremio, Humberto Montes de Oca.

Alrededor de 300 electricistas acudieron a la dependencia federal en demanda del cumplimiento de los acuerdos logrados en septiembre pasado en la mesa de negociación donde participaron autoridades de la SG y el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, explicó.

Ocho trabajadores resultaron heridos y está por confirmarse si dos más fueron detenidos.

"Acudimos a pedir el cumplimiento de los acuerdos y, ante la incapacidad de las autoridades de dar resolver nuestras demandas, la respuesta fue la represión", señaló Montes de Oca, pues "llegaron con gas lacrimógeno y repartiendo toletazos", por lo que decidieron retirarse.

Integrantes del SME se enfrentan a policías en Segob


El Economista
26 Junio, 2012 - 09:01



Mapa: EE

Integrantes del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), se enfrentaron a elementos de la Policía Federal después de querer evadir un cerco de seguridad ubicado afuera de la Secretaría de Gobernación (Segob).

Tras el intento de unos 400 electricistas por ingresar a la Secretaría, los uniformados impidieron el avance de los sindicalistas lo que derivó en un enfrentamiento entre uno y otro bando.

Si bien se reportaron heridos por el enfrentamiento y arribaron paramédicos a la zona, no fue necesario el traslado de lo mismos a nosocomios.

Los miembros del SME aprovecharon su manifestación para quemar basura en la entrada de la calle de Abraham González. Los policías federales, por su cuenta, replegaban a los electricistas hacia la acera, hasta que se retiraron del lugar.

Con información de Milenio
mac

sábado, 23 de junio de 2012

AudioSeGob19 02 2012

Justo Sierra, maestro de América (1848-1912)

DISCURSO DEL MAESTRO JUSTO SIERRA (1910)

Iniciativa para crear la Universidad Autonoma de México

Discurso del señor ministro de Instrucción Pública y Bellas Artes al presentar a la Cámara de Diputados la iniciativa para la fundación de la Universidad Nacional, el 26 de abril de1910.

Discursos, t.v. México, UNAM, 1948. pp. 418-428.

 DISCURSO
Por acuerdo del presidente de la República vengo a tener el honor de ampliar ante esta H. Cámara los fundamentos de la iniciativa a que acaba de darse lectura, y que fue anunciada por el mismo señor presidente en su mensaje del primero de abril.

Empezaré por confesar, señores diputados, que el proyecto de creación de la Universidad no viene precedido por una exigencia clara y terminante de la opinión pública. Este proyecto no es popular, en el rigor de acepción de esta palabra; es gubernamental. No podía ser de otro modo, pues se trata de un acto por el cual el gobierno se desprende, en una porción considerable, de facultades que hasta ahora había ejercido legalmente, y las deposita en un cuerpo que se llamará Universidad Nacional.

Hace muchos años, probablemente más de un cuarto de siglo, que el que aquí habla tuvo el honor de presentar a la Cámara, a que pertenecía entonces, un proyecto de creación de una Universidad Nacional.

Esto era en mí una fe, una devoción; era un principio, una convicción, un credo. Entonces tres objeciones se presentaron al autor de la iniciativa, que lo hicieron desistir en aquellos momentos de ella. Una de esas objeciones fue rápida, instantánea, surgió al ser presentado el proyecto; quizá se encuentre aquí uno de los autores de ella. ¿Por qué se trata de resucitar, se me decía, una cosa que está muerta, y que ha muerto bien? La Universidad era un cuerpo que había cesado de tener funciones adaptables a la marcha de la sociedad, por eso murió, por eso hizo bien el partido liberal en matarla y enterrarla. ¿Por qué resucitarla ahora?

Yo entonces podía decir y digo ahora: la historia se compone de resurrecciones; nada ha muerto, todo resucita y todo vive cuando ha resucitado, si se apropia y sabe adaptarse a las nuevas necesidades, a los nuevos medios. En virtud de eso me atrevía yo a rectificar; esto que se llamaba un muerto, para mí no debía haber muerto, sino que debía haberse transformado; eso sí, radicalmente transformado. Otra de las objeciones, y ésta era de un carácter peculiar en aquella situación, venia de muy alto, y se traducía literalmente en esta cláusula: ¿cómo el gobierno va a consentir en desprenderse de una suma de sus facultades para que otro gobierne la casa que el gobierno paga?

Por el tono franco y militar de esta objeción comprenderá perfectamente bien la Cámara de dónde y cómo venía, hace, lo repito, más de un cuarto siglo.

Pero había todavía una más seria, una más importante, una que realmente me decidió a abandonar este proyecto a su suerte, a su mala suerte.

Esta era la renovación de un reproche que el gran historiador de la civilización inglesa hacía al ministerio del gran rey don Carlos III: ¿cómo fabricáis una alta institución, un vasto edificio de enseñanza superior, y no le dais la base suficiente? Esto equivale a erigir una pirámide invertida, en equilibrio inestable, que no podrá sostenerse. A nosotros se nos decía: si no hay una instrucción primaria, una educación primaria suficientemente sólida, ¿para qué queréis esta corona, para qué llegar hasta la instrucción superior, hasta la que sirve para crear la ciencia, si los elementos de donde toda ella habrá de nutrirse no están preparados?

Cuando tuve el honor de encargarme, por la confianza del presidente, del Ministerio de Instrucción Pública, fue un capítulo -y alguna vez lo dije así en la Cámara de Diputados- , fue un capítulo del programa que sometí a su decisión, y que él aprobó, la creación de la Universidad Nacional; pero se convino en aplazarla para cuando estuviera suficientemente organizada y desarrollada la educación primaria, cuando la educación secundaria hubiese comenzado a dar todos los frutos que de ella se esperaban, cuando la educación profesional estuviera desarrollándose de un modo que le fuera propio y adecuado; sólo entonces, y después de la creación de una Escuela de Estudios Superiores, de Altos Estudios, era cuando podía sonar la hora de creación para la Universidad Nacional; tal es el momento actual, señores diputados.

Si la Universidad tratase simplemente de dar vida a elementos que se distinguieran en el orden del estudio y de la ciencia, para separarlos del resto de la educación nacional; para convertirlos en una especie de aristocracia de grupos distinguidos por el saber, aislados por un nolli me tangere y constituyendo una casta privilegiada que no tuviera su sustento y su vida en la savia propia de la democracia, la Universidad no podría ser creada por vosotros ni habría un ministro que osara presentar ante la Cámara un proyecto semejante.

Se trata de una Universidad que sea el coronamiento de una grande obra de educación nacional; lo repito: si la Universidad se desprendiese completamente de este propósito de convertirla en la parte más alta a que puede llegar la obra de nuestra educación nacional, no correspondería ni a nuestros deseos, ni a nuestros ideales, ni podríais vacilar en negarle vuestro asentimiento. En cada escuela primaria, en cada escuela mexicana se educa a la nación; se educa en porciones, pero se educa a la nación entera en todas ellas; todas contribuyen a la educación nacional; la educación nacional integra la hace la vida misma de la nación; pero la educación nacional en su preparación genuina, en su base, la hace en la escuela el profesor primario. Esta es seguramente la parte más interesante de nuestra obra; de tal manera es una parte interesante en la obra de la educación nacional la educación primaria, que cuando se ha tratado de dar organización superior a un grupo de estudios, a un grupo de conocimientos científicos, dando a los encargados de impartirlos la facultad de gobernarlos, en parte importantísima al menos, jamás hemos pensado en dejar a ese grupo la dirección de la escuela primaria. Tal cosa no podría ser, porque la nación considera que la educación primaria es un servicio público de suprema importancia, y que por ser un servicio público de tamaña importancia necesita vigilarlo, regentearlo directa y constantemente, sin cesar, y por eso, tanto la escuela primaria, como las escuelas normales que preparan su profesorado y que están íntimamente unidas a ella, permanecerán bajo la dirección inmediata del gobierno, que considera a los maestros como verdaderos funcionarios de la nación, responsables ante la nación misma.

La Universidad Nacional, pues, no comprenderá, no tocará la instrucción primaria; si en el Consejo Universitario, sin embargo, hemos dado cabida al representante más alto y genuino de la educación primaria, es decir, al director de la educación primaria, esto consiste, como los señores diputados comprenden perfectamente, en que, si del gobierno de la Universidad es necesario separar los elementos primarios, no puede este cuerpo ignorar cuanto a ellos se refiere, y así tendrá los informes fidedignos indispensables para la resolución de múltiples cuestiones que están ligadas evidentemente con los estudios primarios. Tampoco hemos querido comprender dentro de la jurisdicción universitaria otra clase de escuelas, en las que puede decirse que se elabora de una manera más completa lo que llamaríamos la educación propiamente popular. La educación primaria es popular en toda la extensión de la palabra; es el pueblo mexicano el que se educa en las escuelas primarias; pero cuando se habla en sentido más restringido de la educación popular, es decir, de la educación de las clases menores en recursos, de las clases obreras, de la educación de las personas de trabajo manual, claro está que se sobreentiende que el gobierno ha aceptado la responsabilidad plena y completa de emprender todo cuanto en ella se refiere a su mejora incesante, a su dirección por el camino pedagógico que se ha trazado de antemano. Por eso, las escuelas que se llaman en nuestro tecnicismo administrativo, industriales, mercantiles, escuelas de adultos, etcétera, todas ellas quedarán segregadas de la Universidad, y seguirán bajo la jurisdicción plena del Ministerio de Instrucción Pública; en suma, la misma razón se ha tenido para que estas escuelas que den bajo el gobierno del Ministerio, que la que ha militado en favor de la escuela primaria. Cuando la escuela primaria apura, lleva a cabo, realiza el plan de educación que tiene que realizar, puede decirse que ha preparado al mexicano; de la escuela primaria salen completos el ciudadano y el hombre, y pueden prestar todos los servicios que se les exijan en una nación organizada; pero se necesita todavía otra cosa, subir una escala más, se necesita formar lo que en todas las naciones se llaman los grupos conductores, los grupos que deben guiar a los otros, que se encargarán por una serie de selecciones (pues sin selección no hay evolución posible), de contribuir en primera línea a guiar a la nación, a gobernarla probablemente. Estos grupos, pues, están ligados íntima y profundamente con la base democrática de donde toman su origen.

Un gran pensador ha definido la democracia, una aristocracia abierta, y, pensándolo bien, así es; es imposible que en una sociedad deje de haber jerarquías, que cuando se trata de educación, de adquisición de conocimientos, no haya algunos que no estén mejor provistos de ellos que otros. Por consiguiente, es preciso una escala, es preciso una jerarquía, poner en la cima, en el vértice, en lo más alto, esta suma de conocimientos por los cuales una nación tiene el derecho de ser considerada como formando parte del grupo de la cultura humana general; pero esta jerarquía debe constantemente renovarse por la base democrática de donde sube su savia, en el grupo que se educa en las escuelas primarias. De allí la escuela secundaria, la escuela profesional, la escuela de altos estudios, y éstos son los escalones por los cuales se puede ascender a la cúspide de esa montaña de la educación nacional, que soñamos ver rematada, que no nos gloriamos de rematar nosotros, que erigirán las generaciones venideras; pero a la que, si ahora damos una base suficiente, tornará realidades los propósitos y los ideales que concebimos; bastará ello para podernos gloriar, esta vez sí, con toda razón, de haber cumplido con nuestro deber, con el más sagrado de nuestros deberes, vosotros y nosotros.

Hasta ahora la educación superior en que se va a ocupar especialmente la Universidad Nacional había sido regenteada por el gobierno directamente; sin embargo, los señores diputados comprenden que esto era hacer salir un poco de sus atribuciones genuinas al Estado. El Estado tiene una alta misión política, administrativa y social; pero en esa misión misma hay límites, y si algo no puede ni debe estar a su alcance, es la enseñanza superior, la enseñanza más alta. La enseñanza superior no puede tener, como no tiene la ciencia, otra ley que el método; esto será normalmente fuera del alcance del gobierno. Ella misma, es decir, los docentes que forman por sus conocimientos esta agrupación que se llamará la Universidad Nacional (y así como lo veremos en México, así se ha verificado en todas partes), será la encargada de dictar las leyes propias, las reglas propias de su dirección científica; y no quiere decir esto que el gobierno pueda desentenderse de ellas, ni impedir que lleguen a su conocimiento, ni prescindir, en bien del Estado, del derecho de darles su aprobación última. Pero ello, a no ser en lo que entrañe una reforma de las leyes, será excepcional y cuando, sin embargo, el Ministerio ejerza esta facultad, consultará al Consejo Superior de Educación, a quien consulta cada vez que se trata de decisiones en el orden técnico escolar puro; a él recurrirá para poder depurar en un crisol supremo, en un crisol definitivo, las ventajas de las reformas que la Universidad proponga, mucho más cuando para ser obligatorias tienen naturalmente que tomar un carácter legal, y basta este punto de vista para comprender hasta dónde llegar la acción universitaria.

Porque no venimos a pedir, no podemos pedir a la Cámara el desprendimiento de su facultad legal; lo repetimos, la sanción última se la reserva el gobierno (el gobierno, en el cual está comprendido el Poder Legislativo) cuando se juzgue que su intervención sea constitucionalmente necesaria.

Hemos querido, pretendemos lograr que esta Universidad nueva que, según la esperanza de uno de los personajes más representativos y más inteligentes del clero mexicano debe ser la reproducción de la antigua Universidad para ser vividera, sea precisamente todo lo contrario; no pueden los elementos que compusieron aquella Universidad componer los de ésta. Aquellos estudios se preparaban por medio de la retórica y la gramática, subían a la filosofía y a las seudociencias, entre las cuales estaba comprendida, la astrología, y luego formaban doctores en derecho, en teología, etcétera. Universidades de ese tipo son las que el clero ha organizado y que sostiene, haciendo uso del más perfecto de sus derechos; pero ¿qué punto de comparación posible hay entre ellas y nuestra Universidad, que forzosamente, no sólo por imposición o por reglas que el Poder Legislativo o el Poder Ejecutivo le haya dado, sino por la fuerza misma de las cosas, tendrá que ser un instituto perfectamente laico? Una Universidad es un centro de donde se propaga la ciencia, en que se va a crear la ciencia; ahora bien, señores diputados, la ciencia es laica, la ciencia no tiene más fin que estudiar fenómenos y llegar a esos fenómenos últimos que se llaman leyes superiores. Nada más; todo lo que de esta ruta se separe puede ser muy santo, muy bueno, muy deseable, pero no es ciencia; por consiguiente, si la ciencia es laica, si las universidades se van a consagrar a la adquisición de las verdades científicas, deben ser, por la fuerza misma del término, instituciones laicas. No puede haber, pues, ningún punto de comparación posible entre este órgano creador y la antigua Universidad mexicana que en buena hora murió porque ya de hecho había muerto.

La Universidad mexicana fue fundada, como saben los señores diputados, por Carlos V, quien se dijo: "Creemos que en esos apartados países habrá elementos para organizar en materia de enseñanza algo alto, algo superior; pues bien, demos para ello todas las facilidades que las universidades españolas tienen, establezcamos el órgano que permita a estas funciones ejercitarse." Por eso se creó una Universidad de la cual no fueron excluidos ni los indígenas, por tal manera que realmente es una muestra de la amplitud de miras con que los monarcas y el Consejo de Indias entendieron siempre la cultura de estos pueblos.

La Universidad realizó verdaderos milagros en el orden mental de aquel tiempo; hombres capaces de responder sobre los millares de cuestiones a que podía dar lugar la enseñanza, las lecturas, como se decía y se dice aún. Hubo alguno de estos personajes que pudo responder a una enorme cantidad de sinodales que se iban sucediendo, sobre todas las cuestiones en que se basaba la enseñanza de la Universidad: lo mismo sobre literatura, que sobre teología, derecho o medicina o cánones.

Estos hombres, cuyos nombres se conservan y algunos de cuyos retratos están adornando todavía los muros de importantes establecimientos del gobierno, dieron gran prestigio a la Universidad y gran auge; pero vino un enemigo sereno, tranquilo, solapado y firme; éste modestamente levantó una casa, esa casa se volvió luego un edificio, y la Compañía de Jesús se encargó de la enseñanza de la Nueva España y la Universidad desde entonces empezó a debilitarse, a flaquear; la enseñanza de la Compañía de Jesús, mejor organizada, encargada a hombres que se consagraban exclusivamente a la educación, inmediatamente manifestó que podía dar mejores frutos que los que se habían obtenido de la Universidad; fue en vano que el gran obispo de Puebla, don Juan Palafox, el enemigo clásico de los jesuitas, tratara de resucitar aquella Universidad; abolió sus estatutos y le dio nuevos, y obtuvo la aprobación de la corona de España, y la Universidad tuvo una constitución nueva, en la cual hay disposiciones verdaderamente notables y curiosas; pero el espíritu de Palafox no animó siempre a la Universidad; poco después volvió a descender lentamente por la pendiente que ya había emprendido, y cuando el soplo de las ideas reformistas llegó, ya más bien se trataba de reducir a cenizas a una momia, ya la Universidad había acabado de hecho.

La economía del proyecto cuyos fundamentos estoy ampliando, abusando quizá de la benevolencia de este alto cuerpo, puede reducirse a estos puntos principales: una definición, una composición, una organización; las funciones de este órgano, la personalidad de esta organización. La definición (a ella me he referido en todo lo que acaban de oír los señores diputados) indica que se trata de coordinar en sus elementos superiores la educación nacional. Esto no quiere decir que la Universidad no pueda comprender elementos que no sean elementos de enseñanza superior; esto quiere decir que la Universidad llegará por medio de estos elementos, no siempre superiores, hasta la organización de los estudios superiores en el sentido supremo de la frase, a lo más alto a que podamos aspirar en este país nuevo y sin recursos suficientes todavía. La composición de la Universidad ha dado motivo a objeciones de orden muy serio; porque, como los señores diputados comprenden perfectamente, esta iniciativa antes de tomar su forma definitiva ha sido discutida por comisiones de peritos, por el Consejo de Educación; en torno de sus dictámenes se han agrupado muchas opiniones, todas muy interesantes, algunas aun gubernamentales, que era forzoso tomar en cuenta, por la alta autoridad y el prestigio de quienes las emitían. Estas opiniones han dado lugar a modificaciones serias en la iniciativa, hasta reducirla, lo repito, a los términos en que se presenta ahora a la Cámara. Entre estas objeciones hay una muy importante que precisamente se refiere a la composición de la Universidad.

Los señores diputados que hayan conocido universidades importantes en el extranjero, o que tengan noticias de ellas por sus constituciones que andan en muchas manos, saben bien que, por regla total, no comprenden dentro de ellas los estudios preparatorios. El campo en que se preparan los estudiantes de las universidades no forma parte de las universidades mismas; ahí se preparan los futuros universitarios, que, cuando pueden adquirir el primer grado, el "Becalaureado" que le llamara Palafox, se presentan a las facultades de la Universidad para obtenerlo.

Nosotros concebimos las cosas de otro modo; la instrucción preparatoria de nuestro país es sui generis, por algo se diferencia de las otras que le son análogas en casi todos los demás países. Nuestra Escuela Preparatoria tiene con ellas un gran punto de semejanza, puesto que en suma es la educación en grado secundario la que en ella se imparte; pero su organización es peculiar, distinta, porque se basa, como lo saben los señores diputados, en una serie científica establecida por uno de los grandes legisladores del pensamiento de nuestros tiempos. Hasta ahora esta institución ha dado pruebas tales de su eficacia, que estas pruebas han bastado para convencernos de su bondad definitiva. Puede decirse que un inmenso grupo de la nueva generación mexicana no protesta contra esta aserción, no reniega de esta verdad; está conforme con haber sido educada así y vería como una especie de sacrilegio en el orden intelectual, que este sistema se transformara fundamentalmente.

Nuestra Escuela Preparatoria, tal como es, distinta de las secundarias de todo el mundo, es una escuela en la que se realiza una preparación especial y propia del método que ha de servir para la investigación científica, a donde van a subir grado por grado las escuelas universitarias; de manera que, llegando los educandos a la adquisición, dentro de la Escuela Preparatoria, de ese incomparable instrumento de trabajo, es muy natural que la Universidad tuviese el gobierno directo de institución semejante; porque no había remedio, o la Universidad gobernaba a la Escuela Preparatoria en su parte científica o la Escuela Preparatoria seguía directamente gobernada por el Ministerio de Instrucción Pública. Pero entonces podría producirse alguna vez una diferencia de orientación que pudiera perturbar las funciones de la Universidad; para evitarlo preferimos dejarle el gobierno directo a la Escuela Preparatoria, dando a ésta la facultad de preparar estudiantes para la Escuela de Altos Estudios, en donde pueden obtener un grado universitario de conocimientos especiales y subir al más alto nivel que la ciencia en nuestros días puede alcanzar.

Esta es someramente la razón de por qué entra en la composición de la Universidad la Escuela Preparatoria.

Refiriéndome ahora a la organización de la Universidad, encontrarán los señores diputados algo que realmente constituye otra disposición análoga en importancia a la participación de la Escuela Preparatoria en las escuelas universitarias; puede decirse que ésta de la Preparatoria y la otra a que voy a referirme son las dos distinciones capitales entre nuestra Universidad y quizás todas las universidades del mundo. Nosotros damos cabida dentro del Consejo Universitario a los alumnos de las escuelas universitarias; a este propósito se han hecho, naturalmente, muy serias objeciones de temor; a los que las hacen no les falta simpatía hacia los estudiantes, no por cierto, porque este sentimiento no puede dejar de existir en ninguna parte; no por falta de simpatía, no, señores, sino por temor de que la deficiencia natural de juicio suficiente en los estudiantes los convirtiese dentro del Consejo Universitario en elemento subversivo, que pudiera alterar los fines de la Universidad. Efectivamente esto es así, efectivamente este temor es fundado; pero nosotros tenemos que colocarnos en otros puntos de vista.

El ministro de Instrucción Pública, señores diputados, puede dar testimonio ante vosotros de que en muchas de las cuestiones más complejas y difíciles que ha tenido que resolver o de las que ha tenido que tomar conocimiento íntimo, la intervención, cuando ha sido racional, serena, y lo ha sido algunas veces, del elemento "alumno" de las escuelas, ha sido de tal manera poderosa para hacerle cambiar ciertas determinaciones gubernativas, que no era posible que, al tratarse de organizar el cerebro, por decirlo así, de la nueva Universidad, no contase con ese elemento. El ministro que os habla no ha recogido frecuentemente sino amargos frutos de cuanto ha hecho en favor de los escolares; pero tampoco ha creído nunca que los recogería siempre buenos. El que os habla no es más que un viejo estudiante; todo cuanto ha hecho por esta clase a la que todavía cree pertenecer, no ha sido premiado, por cierto, con una gran adhesión, con muestras extraordinarias de entusiasmo y afecto. Al contrario, únicamente ha obtenido en premio de acciones que él creía, con toda conciencia, conducentes al bien de la clase estudiantil, hostilidades, frecuentes manifestaciones sarcásticas y despectivas, y hasta la aversión.

Si el ministro no fuera digno de la confianza del presidente y del puesto que ocupa, esto habría bastado para hacerle tomar uno de estos dos caminos: o retirarse del puesto o adular y buscar el modo de tener siempre contentas a estas masas estudiantiles a expensas del porvenir de los estudiantes. No ha creído que éste era su deber; su deber ha consistido en procurar el bien de las escuelas a pesar de los alumnos mismos, y esto ha procurado hacerlo siempre. Pero, dicho sea de paso, la lección que el que habla ha sacado de sus relaciones no siempre fáciles con el mundo estudiantil, consiste en darse cuenta de que hay un sentimiento que acaba siempre por dominar, por sobreponerse en el criterio de los mismos estudiantes, aun de los más indómitos, aun de los más revolucionarios, y yo, señores diputados, os confieso que lo digo por experiencia propia; yo fui uno de esos encrespados, de esos adversarios de la autoridad, en fin, yo no tengo mi conciencia limpia en este sentido; esto me ha servido para comprender mejor los móviles de los estudiantes, de los pequeños y ardientes adversarios que me salen frecuentemente al paso. Este sentimiento que se sobrepone a todo, es el sentimiento de la justicia; aun cuando no se les adule, aun cuando no se les favorezca, si se hace justicia con ellos, si no se usa una ley para unos y otra ley para otros, sino la misma para todos, entonces acaba por dominar en su ánimo este sentimiento y domina sobre toda especie de aversión y hostilidad. Y al otro día que han concluido sus estudios, estos mismos estudiantes, que me he encontrado algunas veces en el camino hasta con una piedra en la mano (y estoy tocando un punto del que me voy a retirar pronto), esos mismos han venido a mí, y ya hombres útiles e inteligentes, con deseos de servir a su país, han estrechado mi mano y han sido desde entonces amigos míos, y colaboradores míos como debieran haberlo sido siempre. Hago esta explicación para demostrar que yo no he tenido el espíritu de favorecer de una manera especial al elemento estudiantil al llevar a los alumnos a formar parte de un Consejo Universitario; mi espíritu ha sido de justicia, porque creo que en la Universidad el elemento estudiantil, el "elemento alumno" forma parte integrante de ella, es ella misma, por decirlo así, es ella en marcha.

Cuando las universidades nacieron en la Edad Media, fueron el alma y la vida de esas universidades los estudiantes; ellos formaron esas repúblicas tumultuosas que hubo necesidad de ir desarmando. Efectivamente son la parte más interesante de la Universidad; ¿por qué si ellos, muchas veces pueden llevar una voz que de otro modo no se oiría en el Consejo Universitario, por qué no darle una representación genuina, natural, legal, digámoslo así, dentro de las cuestiones cuya resolución a ellos más que a nadie interesa? Nosotros hemos restringido aquella participación en que pudiera influir desfavorablemente la falta de conocimientos y de juicio bastante de los alumnos; lo hemos restringido a su mínima porción, hemos aceptado dentro de esa iniciativa que los estudiantes de las escuelas universitarias, es decir, los que pertenecen como numerarios a los últimos cursos de estas escuelas, pueden ser nombrados para formar parte del Consejo Universitario de éstas; pero con la condición de que sólo serán admitidos en los debates que se refieran a métodos, programas, exámenes, y eso sin tener voto ninguno, nada más con voz informativa; creemos que con esto todos los temores de que pudiera llevar un elemento notoriamente perturbador al Consejo Universitario, la presencia de los alumnos, quedará desvanecido. La Universidad tiene por función crear hombres de ciencia, hombres de saber en toda le extensión de la palabra; hombres que puedan, que tengan la facilidad que una selección sucesiva puede darles, para adquirir los más altos elementos de la ciencia humana, para propagarla y para crearla. Estos estudiantes de la Universidad no pasarán como en las otras universidades del mundo, por el bachillerato, ni por la licenciatura para llegar a los doctorados; no necesitarán más que presentar los elementos suficientes para convencer de que han hecho, con un aprovechamiento marcado, los estudios secundarios o profesionales, y en virtud de eso, en una especialidad escogida por ellos en las diversas secciones de que se componen los altos estudios, pretender el grado de doctor; este grado la Universidad lo confiere después de pruebas especiales, pruebas serias, pruebas de esas que dan prestigio. Saben bien los señores diputados que la mayor parte de las tesis doctorales de las grandes universidades del mundo han sido obras de primera importancia en la evolución científica, y algunas de ellas han originado un cambio en las corrientes científicas del saber humano. Un doctorado organizado así puede ser la obra más importante de la Universidad.

Hemos adoptado este título de doctor, porque es el aceptado en todas las universidades del mundo, y porque responde de una manera muy clara a esta idea: "es de los que más saben", según el dictamen de la Universidad. Tendrá el estudiante alicientes para llegar ahí, porque el doctor universitario adquirirá el derecho de ir a completar sus estudios al país escogido por él, a expensas de la Universidad, y volverá a establecer sus enseñanzas aquí en los planteles universitarios, o abrirá, dentro de la Universidad también, clases libres, a las que puede convocar a quienes quiera, con tal de que sean alumnos de la Universidad; en ella puede abrir cursos especiales, personales, digamos así. Estos profesores libres no es preciso que sean doctores, pero probablemente se reclutarán dentro del doctorado y serán, sin duda, los elementos capitales de la vida misma de la Universidad, pues pueden contribuir de una manera eficaz, constante y marcada, al adelanto, al progreso de la ciencia bajo los auspicios de la Universidad.

Para que la Universidad pueda llegar a realizar estos fines no le basta, señores diputados, ni podía bastarle la protección del gobierno, el apoyo del gobierno; él se propone, efectivamente, impartirle toda cuanta ayuda pueda en el orden pecuniario y moral para que pueda desenvolverse ampliamente en todas las direcciones que le sean necesarias. Además, necesita la Universidad que la nación entera la acepte, que la nación mexicana la adopte como suya, que procure infundirle su aliento y su vida, que la impulse, que le proporcione los medios de realizar sus fines, y para esto le hemos dado todos los caracteres y todas las capacidades necesarias para adquirir los recursos que le sean indispensables para lograr organizarse, para progresar siempre más, para estar siempre lista a extender su acción sobre la nación entera. Por eso os pedimos que la autoricéis, dotándola de las capacidades jurídicas suficientes para adquirir bienes y para hacer con ellos lo que juzgue conveniente, siempre con el conocimiento del gobierno. Porque, había que tenerlo siempre presente, esta Universidad, señores, es una Universidad de Estado, como lo dije al principio; no se trata de una Universidad independiente, se trata de un cuerpo suficientemente autonómico dentro de campo científico, pero que es, al mismo tiempo, una Universidad oficial, un órgano del Estado para la adquisición de los altos conocimientos, con la garantía de que serán también respetadas en ella todas las libertades que le puede dar la constitución de su personalidad jurídica, sin la que no le sería dado extender su acción sobre todos los ámbitos de la nación mexicana pensante y utilizar todos los elementos para realizar su programa científico.

Estos razonamientos naturalmente resultan pálidos en este informe, mas espero que cuando llegue el debate de esta iniciativa, tanto los miembros de las comisiones, si la aceptan, como los órganos del gobierno, los explayarán cuando fuese necesario; entonces conocerán, si lo juzgan oportuno los señores diputados, en detalles más extensos, los fundamentos de disposiciones que la iniciativa contiene y que no he podido ni mencionar aquí. Ahora temería fatigar vuestra benevolencia.

Traigo a esta Cámara, por expresa recomendación del señor presidente de la República, el encargo de pedirle que considere atentamente como es su deber y como siempre lo ha hecho cuando se ha tratado de obras de esta importancia, el proyecto de ley que le está sometido.

Ciertamente que yo creo, pudiera ser que me equivocase y puede ser que obedezca a un antiquísimo prejuicio, yo creo que esta iniciativa, que la realización de este proyecto será en el orden intelectual algo tan grandioso y de tanta trascendencia como lo que la gran voluntad del hombre que preside los destinos de la nación ha logrado realizar en el orden material y en el orden económico.

Si así lo creen los señores diputados, que hagan el honor a esta iniciativa de darle vida definitiva poniendo en ella el sello de su aprobación.

jueves, 21 de junio de 2012

* La disputa económica por el país * La guerra en las fuerzas armadas * Divide Felipe Calderón a Ejército

Revista Contralinea. Autor: Miguel Badillo
Oficio de Papel
11-junio-2012


Arriba de la turbulencia política que vive el país con motivo de las campañas políticas para elegir el 1 de julio a quien será el próximo presidente de la República, está la disputa de poderosos grupos empresariales por el control económico del país. Es en esta batalla económica, que se libra lejos del lodazal político y de la guerra sucia que sale de las casas de campaña y de las sedes de los partidos políticos, en donde los candidatos apuestan sus fichas para buscar financiamiento y, al mismo tiempo, hacer los compromisos necesarios que les permita gobernar el país los próximos seis años.

En este juego perverso entre la política y el dinero, los empresarios se dejan querer y mientras algunos demuestran abiertamente sus inclinaciones hacia el candidato que les garantice mayores ganancias de sus fortunas, otros otorgan con discreción apoyos (con dinero en efectivo por eso de los límites legales) a todos los aspirantes para cubrir cualquier resultado en sus apuestas por el que será el nuevo gobernante.

En ese terreno identificamos cómo el magnate Carlos Slim, dueño del grupo Carso y de muchas empresas más, inclina junto con el grupo Monterrey sus preferencias hacia el candidato presidencial de las izquierdas Andrés Manuel López Obrador. El grupo rival lo encabezan el presidente de la Televisa, Emilio Azcárraga; el exsecretario de Hacienda, Francisco Gil Díaz, y el exdueño de Banamex, Roberto Hernández, quienes apuestan abiertamente por el aspirante priista Enrique Peña Nieto. De Josefina ni hablar, prácticamente los empresarios abandonaron como ratas el barco de campaña ante su inminente hundimiento, pues en el capitalismo salvaje nadie apuesta a perder y en el juego político los compromisos sociales son los que menos importan.

Otra guerra no menos intensa se libra en las fuerzas armadas, en donde las venganzas, las traiciones, los chantajes, las mentiras y las amenazas están en el terreno de la disputa por el control de las secretarías de la Defensa Nacional y de Marina.

Es el Ejército otra de las víctimas de la caótica administración de Felipe Calderón. Ni siquiera las Fuerzas Armadas escaparon al caos que generó la desarticulada gestión del Poder Ejecutivo. Hoy, el Ejército Mexicano y sus más altos mandos enfrentan y sufren un gran desprestigio y la división de sus filas frente al cambio de régimen, pero sobre todo frente al entreguismo del actual gobierno ante Estados Unidos. Todo con fines políticos y de protección que buscaría Calderón en el vecino país una vez que concluya su gobierno, pues permanecer en México para él sería un suicidio después de los 70 mil muertos y desaparecidos que acumuló su gestión.

En una detallada e interesante investigación del reportero Zósimo Camacho, publicada en la revista Contralínea, se establece cómo generales y coroneles en activo acusan al gobierno de Felipe Calderón de desarticular al Ejército Mexicano.

Para empezar, los arraigos ordenados contra exmandos superiores de la Secretaría de la Defensa Nacional, y los amagos contra decenas de militares más, no buscarían limpiar una institución claramente penetrada por el crimen organizado, sino apuntalar al actual subsecretario Carlos Demetrio Gaytán Ochoa como el próximo secretario de la Defensa, quien por lo demás también es investigado en Estados Unidos.

Este general de división buscaría imponerse al candidato triunfador de las elecciones del 1 de julio. Generales en retiro y especialistas en Fuerzas Armadas y seguridad nacional aseguran que Calderón dejará un Ejército dividido, desprestigiado y débil frente a las presiones de los poderes civiles y militares estadunidenses.

El operativo con el que se detuvo y arraigó a tres generales y un teniente coronel en mayo pasado habría sido preparado y supervisado por otro militar: el poderoso subsecretario de la Defensa Nacional, Carlos Demetrio Gaytán Ochoa. Este general de división diplomado de estado mayor habría coordinado, junto con el titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), Genaro García Luna (quien se paseaba tranquilo en las gradas del partido entre las selecciones de México y Guyana la semana pasada), el golpe en contra de los militares que se oponían a sus aspiraciones a la titularidad de la Defensa.

“El grupo del general Gaytán Ochoa festeja porque todo le salió bien”, asegura un general de división en activo que habló con la condición de que su nombre se mantuviera bajo reserva.

Según las fuentes castrenses, el golpe contra los exmandos superiores Tomás Ángeles Dauahare y Ricardo Escorcia Vargas –además de Roberto Dawe e Isidro de Jesús Hernández– habría sido objetado por el general secretario de la Defensa Nacional, Guillermo Galván Galván, y por el propio presidente de la República, Felipe Calderón. La causa, los costos que pagaría la institución: desprestigio social e inestabilidad interna. Gaytán Ochoa se habría encargado de convencer al titular de la Seden, y García Luna, al Ejecutivo federal.

Y es que el general de división diplomado de estado mayor en retiro Tomás Ángeles Dauahare –quien contaba con prestigio y liderazgo entre la comunidad castrense– había cometido cuatro “faltas” desde que él mismo se desempeñaba como subsecretario de la Defensa durante los dos primeros años del calderonismo: se opuso a la creación de una fuerza militar continental, como lo había propuesto Estados Unidos y, en términos generales, se oponía a lo que consideraba la “injerencia” de ese país en los asuntos internos de México; criticaba severamente la “guerra” contra el narcotráfico y aseguraba que el gobierno de Felipe Calderón no contaba con estrategia alguna; se había acercado al priísmo con el que incluso se mostraba obsequioso; y, finalmente, había iniciado una investigación –con medios propios y al parecer por encargo del equipo de Enrique Peña Nieto– de los grupos y los intereses al interior del Ejército Mexicano.

Esa investigación lo habría llevado a reunirse con el general Mario Arturo Acosta Chaparro precisamente un día antes de que este último fuera asesinado el 20 de abril, y un día antes de que se concretara una nueva cita.

La operación en la Procuraduría General de la República (PGR) se habría realizado a través de un teniente coronel, comisionado de la Sedena en esa dependencia.

“La peor derrota al Ejército Mexicano se la impuso Felipe Calderón”, le dijo al reportero Zósimo Camacho el investigador académico Guillermo Garduño, sociólogo especialista en seguridad nacional y Fuerzas Armadas.

Especialistas y militares señalan que las detenciones constituyen un embate contra el Ejército Mexicano como institución. Aseguran que más allá de la inocencia o culpabilidad de los militares procesados, los tiempos y las formas de las detenciones revelan que las acciones persiguen fines políticos del grupo que encabezan el propio presidente de la República, Felipe Calderón, y el secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna.

Jorge Luis Sierra –especialista en Fuerzas Armadas egresado del Centro Hemisférico de Estudios de la Defensa, de la Universidad de la Defensa Nacional en Washington– considera que las disputas al interior del gabinete de Felipe Calderón podrían ser el origen de los golpes propinados al Ejército.

Agrega que en esas disputas, el propio presidente de la República habría tomado una posición para favorecer a un grupo, pues en temas de tal trascendencia el titular del Ejecutivo “tendría que ser avisado y él mismo debería autorizar si se procede contra militares de alto rango, como este caso”.

En tan sólo tres días y en pleno proceso electoral para definir al próximo gobierno de la República, los militares –quienes ocuparon mandos superiores en la Secretaría de la Defensa Nacional– fueron detenidos y arraigados por supuestos nexos con la delincuencia organizada, en particular con el cártel de los hermanos Beltrán Leyva. En esos días la PGR advirtió de manera inmediata que las investigaciones que involucran a efectivos militares continúan.

La mañana del 16 de mayo, en plena campaña electoral, la mayoría de los medios de circulación nacional destacaron las detenciones, la noche anterior, del general de división retirado Tomás Ángeles Dauahare y del general brigadier de estado mayor en activo, Roberto Dawe González. Un día después, el 17, serían detenidos el general de división retirado Ricardo Escorcia Vargas y el teniente coronel de caballería retirado Silvio Isidro de Jesús Hernández Soto.

La tarde del 15 de mayo pasado, el general de división diplomado de estado mayor en retiro Ángeles Dauahare se convirtió en el militar de mayor rango detenido por supuestos vínculos con el narcotráfico.

Dauahare, de 69 años, fue comandante de dos batallones de infantería (el 27 y el quinto); jefe de la Sección Quinta del Estado Mayor de la Defensa Nacional, encargada de los planes estratégicos; jefe de Estado Mayor de la 23 zona militar; secretario particular del secretario de la Defensa Nacional (Enrique Cervantes Aguirre, durante el sexenio de Ernesto Zedillo); director del Heroico Colegio Militar y director general del Instituto de Seguridad Social para las Fuerzas Armadas Mexicanas. También se desempeñó como agregado de Defensa Militar y Aérea en la embajada de México en Estados Unidos.

Desde que fue secretario del general Enrique Cervantes, se vinculó a los asuntos de inteligencia, particularmente a los de la lucha contra el narcotráfico. Egresó del Heroico Colegio Militar el 1 de enero de 1964. También cursó en la Escuela Superior de Guerra la licenciatura en Administración Militar. Al interior del Ejército se considera que ha llevado una vida austera.

La misma noche del 15 de mayo fue detenido un militar de alto rango en activo: el general brigadier diplomado de estado mayor Roberto Dawe González, quien fungía, hasta el momento de su detención, como jefe de Estado Mayor de la 20 zona militar en Colima. Se había desempeñado hasta 2010 como jefe de Estado Mayor de Guardias Presidenciales. En 2007 había sido acusado por subordinados de supuestos hechos de corrupción que incluían la venta de vehículos propiedad de las Fuerzas Armadas.

El 17 sería detenido por policías militares el general de división diplomado de estado mayor retirado Ricardo Escorcia Vargas. En su carrera castrense, llegó a ser comandante de la tercera región militar, con sede en Sinaloa, y de la 24 zona militar, con sede en Morelos. En su momento, fue señalado de inoperancia ante el aviso, por parte de la agencia antidrogas estadunidense (DEA, por su sigla en inglés), del aterrizaje de una avioneta con cocaína en Xochitepec el 28 de diciembre de 2007. Egresó del Heroico Colegio Militar en 1967.

También el 17 de mayo sería detenido el teniente coronel de caballería retirado Silvio Isidro de Jesús Hernández Soto. Llegó a ser subjefe de escoltas en la Residencia Oficial de Los Pinos. Durante el sexenio de Vicente Fox se desempeñó como inspector general en la Policía Federal. Fue director de la Policía Ministerial de Sinaloa y recientemente director de la Agencia Veracruzana de Investigaciones. En 2006 formó parte del equipo de seguridad que se encargó de la custodia del candidato a la Presidencia de la República por la coalición Por el Bien de Todos, Andrés Manuel López Obrador, bajo las órdenes del general de brigada Audomaro Martínez Zapata.

Los cuatro exmandos superiores del Ejército Mexicano han sido presentados ante la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) al ser vinculados por el testigo protegido Jennifer con los hermanos Beltrán Leyva. De la averiguación previa PGR/SIEDO/EUIDCS/0241/2008 se desprenden las órdenes de localización y presentación y las órdenes de arraigo. Jennifer ha señalado a los generales y al teniente coronel como colaboradores de los Beltrán cuando éstos integraban una facción del cártel de Sinaloa, encabezado por Joaquín Guzmán Loera, el Chapo. Ahora los Beltrán, aliados a Los Zetas, mantienen una lucha sangrienta contra el cártel de Sinaloa por el control de las “plazas”, como llaman los narcotraficantes a los territorios donde trasiegan y comercializan drogas.

El debate de #YoSoy132



Periódico La Jornada
Arturo Cano

Miércoles 20 de junio de 2012

- Ejercen jóvenes su derecho de réplica ante tres candidatos
- Colocan carpeta con preguntas en el lugar que Peña Nieto dejó vacío
- López Obrador, Vázquez Mota y Quadri reiteran sus propuestas

Integrantes de #YoSoy132, al concluir la conferencia de prensa que ofrecieron después del debate entre tres de los cuatro candidatos a la Presidencia de la República: Josefina Vázquez Mota, del PAN; Andrés Manuel López Obrador, de la coalición Movimiento Progresista, y Gabriel Quadri de la Torre, del Panal, en un salón de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito FederalFoto Francisco Olvera

El mismo día en que Enrique Peña Nieto dijo no al movimiento #YoSoy132, aceptó reunirse con las huestes de Elba Esther Gordillo. El candidato presidencial del PRI rechazó, como se sabe, asistir al debate organizado por los jóvenes, aduciendo que no le garantizaban “condiciones de neutralidad y de imparcialidad”. Sin embargo, aceptó asistir, este viernes, a una reunión con la cúpula del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, que desde su neutralidad respalda a otro candidato presidencial, Gabriel Quadri de la Torre, el único que hasta ahora había accedido a participar en un cónclave magisterial.

En el cierre del debate organizado por el movimiento #YoSoy132, el moderador entregó sendas carpetas a los tres candidatos asistentes, con centenares de preguntas hechas por jóvenes de todo el país. La carpeta de Peña Nieto terminó en la silla vacía que los organizadores del insólito ejercicio dejaron para subrayar su ausencia.

El encuentro –“una mesa redonda”, según Pedro Joaquín Coldwell, presidente del PRI– arrancó con mensajes de los tres candidatos asistentes. Andrés Manuel López Obrador, primero en hacer uso de la palabra, agradeció a los jóvenes y a su movimiento “limpio, auténtico, crítico” su “aporte fundamental a la vida pública”.

Coincidió Josefina Vázquez Mota, quien atribuyó a la movilización juvenil que el segundo debate –al cual sí asistieron los cuatro aspirantes– haya sido visto por millones de mexicanos. Ustedes, les dijo, “han encendido la luz”.

En esos primeros minutos las redes sociales enloquecieron por la “caída” de la señal. En Twitter y Facebook se multiplicaron las recomendaciones sobre las ligas adecuadas para ver el ejercicio.

Menudearon comentarios como los siguientes: “Error garrafal que #YoSoy132 no permitiera a la Tv una transmisión directa del debate. Quién les entiende pues”; “Vale madre, no se puede ver el debate”; “Ya tiraron la página los priístas”; “La página del canal 22 se murió”.

En pocos minutos, cada interesado halló la mejor ventana para seguir el encuentro, aunque a ratos la señal fallaba.

Vinieron las preguntas, el rejuego entre los aspirantes y, aquí lo inédito, las réplicas de muchachos y muchachas que, conectados frente a sus pantallas, cuestionaron a los candidatos. “Sin Televisa, esto es nuestro”, se escribió en las redes.

Cada uno de los candidatos volvió a lo suyo, a las propuestas o fórmulas en que ha insistido a lo largo de las campañas. Pero también tuvieron que atender las preguntas, las réplicas de los muchachos desde sus cámaras.

Los preguntones fijaron una agenda que le resultó más cómoda al candidato del Movimiento Progresista, pero la candidata del PAN sorteó las aguas cuando habló de la reforma de derechos humanos de 2011 (aprobada por todos los partidos, pero presumida como propia por Felipe Calderón) como base del “diseño” futuro de políticas públicas.

Gabriel Quadri repitió la propuesta que hizo frente a la cúpula del SNTE, la misma que recibirá a Peña Nieto en un par de días. Un “gabinete de educación”, encabezado por el secretario de Gobernación, como si no fuera Alejandro Poiré quien ha llevado mano en el conflicto magisterial reciente. Y le brincó la pregunta que lo ha perseguido a lo largo y ancho del país, sobre su subordinación a la profesora Gordillo: “No soy títere de nadie, y estoy decidido a emprender la reforma educativa”, volvió a decir.

Todo es “más amistoso” sin Peña

El eje de las movilizaciones juveniles fue tema inevitable.

López Obrador le entró a su mole: “Están queriendo imponer al próximo presidente de México, se han dedicado a impulsar a un candidato con la publicidad, con la mercadotecnia. Es urgente la democratización (de los medios). Como camino hablo de la competencia, de la expansión de Internet (cosa en la que coincidieron los otros dos aspirantes) y de terminar con los monopolios que se dedican a administrar la ignorancia”.

Vázquez Mota vio la suya y cuestionó a López Obrador, sugiriendo una relación fluida entre el tabasqueño y el mayor magnate del país. “No tengo compromiso con ningún grupo de interés creado”, dijo él. Que Slim, Azcárraga y Salinas Pliego compitan, soltó. Y fue a más: “Fui el primero en decir que era una mentira que todo México era territorio Telcel”.

Mientras los candidatos hablaban, la señal fallaba una y otra vez. Las redes sociales eran otro debate. “La señal se cae más que la de Telcel”, decía un usuario. “Todo es más amistoso sin @epn, sin el puerquito de las burlas se ponen más serios”, juzgaba el analítico.

Del duopolio al monopolio, el debate llegó al tema de la energía. Vázquez Mota se pronunció por abrir Petróleos Mexicanos a la “inversión privada complementaria; abrir estos monopolios y hacerlos de todos los mexicanos y no sólo de unos cuantos” (con referencia expresa a los viajes de lujo de la hija del “cacique” sindical de Pemex). Quadri se sumó y en el camino trató, sin conseguirlo, que la panista fuese más clara en su propuesta de inversión “complementaria”.

En ese tema López Obrador se mantuvo en lo suyo: “La Constitución es muy clara. Lo que hay detrás es la ambición: ahora andan zopiloteando y se quieren quedar con el petróleo… Aun con la corrupción, aporta un billón de pesos a la hacienda pública; 10 grandes empresas pagan 15 veces menos que Pemex. ¿Qué quieren? ¿Terminar de destruir el país?”

Volvió a la carga Vázquez Mota: “El candidato del PRD no quiere las reformas… un país sin reformas es un país condenado a la mediocridad”. Y al espot: “Nos lleva al caos, a las deudas, a las crisis económicas… a ese México donde los niños tienen que salirse de las escuelas y se pierden las propiedades”.

Drogas, aborto y gabinete

La legalización de las drogas, el aborto, el papel del Instituto Federal Electoral (IFE), fueron otros temas abordados en un debate sin rispideces y con la intervención de jóvenes mediante una plataforma de Internet.

Vázquez Mota evadió el tema de la legalización de las drogas, lo mismo que López Obrador, pero aprovechó el asunto para dar un raspón al ausente. “A diferencia del candidato del PRI, que no quiso venir, yo sí creo en ustedes (la Marina y el Ejército). No voy a importar policías”.

“No voy a encabezar un gobierno de ocurrencias, nos ha costado mucho. Sin tener un diagnóstico se tomó una decisión que agravó la situación de inseguridad y violencia”, dijo en su turno el tabasqueño.

Mientras la panista y Quadri expresaron confianza en el IFE, López Obrador se dijo partidario de cambiar la forma en que se elige a las autoridades electorales para terminar con las cuotas partidistas.

Dado que el candidato de las izquierdas había insistido en que tiene listo un gabinete, Vázquez Mota aprovechó para dar algunos nombres, aunque dijo no haber consultado a los mencionados: Mario Molina, Carlos Elizondo, Esther Orozco, Consuelo Sáizar, Luis de la Calle, Cecilia Soto. Y ya entrada en gastos, pidió a los jóvenes que le presenten una terna para escoger al encargado de atenderlos.

“Somos un movimiento de jóvenes mexicanos que buscan un proceso democrático limpio y honesto de parte de candidatos, instituciones y medios”, dijeron los organizadores del primer debate no convocado por autoridades y sin la presencia de las televisoras. Unos dirán que ese hecho es, en sí mismo, un triunfo del movimiento juvenil.

El SNTE, con sentido de oportunidad, anunció que este miércoles informará de su reunión con “otro candidato”. En 2006, la cúpula magisterial sólo se encontró con Felipe Calderón.